Textil especializada

La multinacional catalana Buff facturó 48,2 millones en el último ejercicio

Instalaciones de Buff en Igualada.

Instalaciones de Buff en Igualada.

Eduardo López Alonso

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La multinacional catalana Buff alcanzó el pasado ejercicio fiscal una facturación de 48,2 millones de euros. La firma especializada en prendas textiles para el cuello y la cabeza mantuvo las ventas en el marco de un ejercicio complicado y de reajuste de estrategias en EEUU, frente a la facturación de 49,6 millones del ejercicio anterior. La compañía, que cuenta con 400 empleados en el mundo, exporta a más de 80 países y tiene filiales en EEUU, Canadá, Reino Unido, Alemania, Francia e Italia.

El director general de Original Buff, David Camps, señaló mediante un comunicado que el último año "de transición en el mercado norteamericano, donde ha continuado el ajuste de inventarios en la cadena de distribución". El ejecutivo asegura que la marca está creciendo "de manera relevante" en mercados europeos, donde trabaja para consolidarse y potenciar su presencia comercial en Francia e Italia.

Buff se ha sumado en el último ejercicio al movimiento de empresas B-Corp, por el que ha obtenido un certificado que reconoce sus esfuerzos en el campo de la sostenibilidad. La comunidad B Corp es un movimiento en crecimiento que cuenta con más de 6.000 empresas que se están reinventando y redefiniendo lo que significa el éxito, no solo en lo económico. Se trata de reducir la huella de carbono y acercar en la medida de lo posible la fabricación de los productos al consumidor. En ese marco figura el lanzamiento de la campaña 'Made in Barcelona' esta pasada primavera, con lo que la marca ha conseguido que el 90% de los productos Buff se estén produciendo en proximidad, y espera poder llegar al 100% en los próximos años.

Según Camps, en el marco del plan estratégico general, la compañía pretende crecer en el ejercicio 2023-2024, consolidándose en los mercados ya existentes y potenciando la expansión comercial en Francia e Italia donde ha internalizado la distribución de la marca.

La marca fabrica en Igualada productos técnicos, de los que destacan especialmente los dirigidos a la práctica deportiva en la montaña. Buff ha lanzado últimamente una colección de productos diseñados especialmente para los ciclistas que incluye tubulares, gorras y cintas de cabeza con protección solar, ultraligeros y con elementos reflectantes. Se trata de una colección de cinco productos fabricados utilizando materiales sostenibles como el merino y los hilos de poliéster, que se obtienen del reciclaje de botellas de plástico.

Más allá de los objetivos de ventas y facturación, Buff quiere destacar siempre sus objetivos en el campo de la sostenibilidad, adaptándose así a los clientes a los que quiere dirigirse. La conservación medioambiental, al ahorro energético y al cuidado de la comunidad están es el 'corpus' ético de la empresa. La gama de productos de la marca es mucho hoy más amplia que en sus orígenes. Ha disversificado la producción hacia las gorras, cintas para la cabeza y pasamontañas.