Fraude a la Seguridad Social

El TSJC condena a la extinta Joyners por emplear a 104 cuidadoras como falsas autónomas

Fijos discontinuos, convenios y falsos autónomos: estos son los fraudes que más perseguirá la Inspección de Trabajo en 2023

La vida 'en B' de las cuidadoras

Una persona en silla de ruedas, acompañada de una cuidadora, en Barcelona

Una persona en silla de ruedas, acompañada de una cuidadora, en Barcelona / Danny Caminal

Gabriel Ubieto

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El Tribunal Superior de Justicia de Catalunya (TSJC) ha condenado a la hoy extinta plataforma Joyners por emplear a 104 trabajadores como falsos autónomos. Los magistrados avalan las actuaciones de Inspección de Trabajo, que en 2018 acreditó que esta ‘startup’, especializada en ofrecer servicios de atención domiciliaria a personas en situación de dependencia, debería haber tenido a sus empleadas como asalariadas y pagarles sus cotizaciones sociales. Y, según el fallo recientemente publicado y al que ha tenido acceso EL PERIÓDICO, ratifican el fraude por cuotas impagadas a la Tesorería General de la Seguridad Social (TGSS) por valor de unos 100.000 euros, según reconocen desde la empresa.  

"Estoy muy decepcionado, me sabe muy mal que un emprendedor que mira porque la gente salga de la economía sumergida y tenga unos derechos sea perseguido por el Estado. Han sido muy miopes", afirma Oriol de Pablo, uno de sus fundadores, en conversación con EL PERIÓDICO.

Fundada en 2014, Joyners fue en su día una de las ‘startups’ prometedoras del ecosistema catalán, con sede de trabajo en el distrito 22@ de Barcelona. De la misma generación que Glovo -nacieron ambas con apenas un mes de diferencia-, si la firma de las mochilas amarillas desarrolló un algoritmo para triangular repartidores autónomos con restaurantes y clientes que en su casa esperan comida, Joyners hizo lo propio pero entre cuidadoras, también autónomas, y familias, hospitales, residencias o aseguradoras con una persona necesitada de asistencia.

Comercialmente bautizada como Joyners, pero formalmente registrada como Ageing Well S.L., esta plataforma llegó a emplear a 104 cuidadoras en Barcelona entre 2016 y 2017, según ha podido acreditar la ‘policía laboral’. Lo que vendría a ser la punta del iceberg, ya que Joyners también tuvo actividad en Madrid, València y Zaragoza y afirmaba públicamente tener más de 1.000 ‘colaboradores’. Esa sociedad defendía el 'emprendimiento social' y ofrecer a esas profesionales -la mayoría mujeres- una vía para ejercer sin tener que pasar por los cobros 'en B' y con el apoyo de una plataforma si desde los domicilios se propasaban con ellas.

Todos sus servicios los gestionaba con una plantilla que formalmente se limitaba a ocho trabajadores de oficina. Sus fundadores fueron Oriol de Pablo, Mireia Llort y Xavier Esteve. ¿Cómo se aseguraba Joyners tener cuidadoras suficientes para atender un negocio que llegó a superar los 4.000 usuarios? Reclutando "autónomos" y socios trabajadores de Factoo, que utilizaba esta cooperativa para facturar como autónomos.  

Citando a Glovo y al Supremo

Si bien la relación entre Joyners y las cuidadoras era formalmente de socios e iguales, la primera exigía a la segunda una serie de obligaciones más propias de una relación de asalariado. Por ejemplo, si un cuidador no se personaba a una cita concertada, Joyners se reservaba el derecho de retener los pagos y penalizarle a futuro a la hora de asignarle siguientes servicios.

También obligaba que todos los pagos por servicios prestados se realizaran a través de su plataforma, bajo amenaza de expulsar al cuidador de la misma y retener el dinero acumulado. Así como fijar dónde y cuándo los cuidadores debían ir a prestar los servicios, siendo la cartera de clientes de Joyners, no de quienes prestaban los cuidados.  

Joyners obligaba a los ‘autónomos’ a preavisar con dos semanas de antelación si iban a cogerse unas vacaciones -y especificar de cuánto tiempo-, así como prohibía, salvo permiso expreso, que el autónomo subocontratara la actividad a un tercero. Todos ellos signos que los inspectores consideraron probatorios de una relación laboral y no mercantil.

Los magistrados citan la sentencia del Tribunal Supremo que condenó a Glovo por emplear a falsos autónomos para apuntalar su fallo. "Para ello se sirve de repartidores que no disponen de una organización empresarial propia y autónoma, los cuales prestan su servicio insertados en la organización de trabajo del empleador, sometidos a la dirección y organización de la plataforma", reza la misma. Y es que, sustituyendo la palabra ‘repartidores’ por ‘cuidadores’, los magistrados ven clara coincidencia en los dos ‘modus operandi’. 

Cierra tras estallar el covid

El 11 de enero del 2021 Joyners entró en concurso de acreedores, según publicó en su día el Boletín Oficial del Estado (BOE). Sus fundadores arguyen el impacto del covid, y sus restricciones de movilidad asociadas, como motivo de la fallida de la sociedad. Al margen del concurso, los fundadores de Joyners han seguido impugnado las actas de Inspección. 

Seis meses después de declararse en concurso, el juzgado de lo social número nueve de Barcelona avalaba la actuación de Inspección de Trabajo. Joyners no aceptó dicho falló y presentó recurso, que ha provocado de nuevo el aval de los magistrados del TSJC a que esta empresa se valía de una red de falsos autónomos para operar a menor coste. Ahora, tras un nuevo recurso, está en vías de llegar al Supremo.

Joyners no fue el último proyecto de emprendimiento de dos de sus fundadores. Oriol de Pablo es conocido actualmente por ser el fundador y consejero delegado de Vicio, una cadena de hamburgueserías que tiene como accionista, entre otros, a Lionel Messi. Xavier Esteve, otro de los ex Joyners, es su director de tecnología, según exhibe en su Linkedin. Estas hamburguesas, conocidas principalmente por su intenso despliegue comercial, llegan a sus comensales en la mayoría de casos a través de repartidores. Y Glovo, con varios macro juicios pendientes por emplear a sus ‘riders’ como falsos autónomos y adeudar por ello centenares de millones a la Seguridad Social, es su principal canal de distribución. 

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