Crisis energética

¿Cómo te afectarán las nuevas medidas para rebajar las facturas de luz y gas?

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Las medidas que las empresas pueden adoptar para ahorrar en la factura de la luz tras el aumento del precio del 60%

Las medidas que las empresas pueden adoptar para ahorrar en la factura de la luz tras el aumento del precio del 60% / PEXELS

Sara Ledo

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El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, anunció el 13 de octubre en el Congreso un nuevo paquete de medidas energéticas para "proteger al 40% de los hogares" que movilizará 3.000 millones de euros e incluirá el refuerzo del bono social eléctrico y térmico y la rebaja de la factura del gas para las comunidades de vecinos. Las medidas habían sido anunciadas por la vicepresidenta tercera y ministra para la Transición Energética, Teresa Ribera, hace una semana, en la presentación del plan de contingencia, y este martes han sido aprobadas por el Consejo de Ministros. Estas son algunas de las claves.

Nueva categoría de bono eléctrico

La principal novedad es la creación de una nueva categoría de bono social eléctrico para "hogares trabajadores con bajos ingresos" que se beneficiarán de un descuento en la factura de la luz del 40%. Se podrán acoger a esta medida aquellos consumidores con una renta entre 1,5 y 2 veces el IPREM en 14 pagas, que son el rango siguiente a los consumidores considerados actualmente como vulnerables (hasta 1,5 veces el IPREM). Teniendo en cuenta el IPREM para 2023 (8.400 euros), esto supone que a un rango de hogares con una renta inferior a 16.800 euros al año, en el caso de estar formado solo por un adulto, y 27.720 euros, en el caso de una familia de cuatro miembros. Los beneficiarios de este descuento no recibirán el bono social térmico.

Para poder beneficiarse del bono social eléctrico, en cualquier categoría, los consumidores deben tener un tarifa regulada, el denominado Precio Voluntario para el Pequeño Consumidor (PVPC), que se contrata a través de las llamadas comercializadoras de referencia (Endesa Energía XXI, Curenergía, Gas & Power, Baser, Régsiti, Comercializador de Referencia Energético, Teramelcor y Energía Ceuta XXI). Es importante saber que no es una ayuda automática, sino que se debe solicitar.

No es la primera vez que se crea una categoría nueva de forma temporal. También se hizo durante la pandemia, para ayudar a aquellos trabajadores que a consecuencia del coronavirus estuviesen en desempleo, erte, con jornada reducida, o con algún miembro de la familia en esas circunstancias y no tuvieran unos ingresos mensuales mínimos.

Más descuentos para consumidores vulnerables

Otra de las novedades es la ampliación del descuento del bono social eléctrico y térmico que reciben actualmente 1,3 millones de hogares en España. El primero es un descuento en la factura de la luz (siempre hablando de la tarifa regulada que se dirige a pequeños consumidores) para consumidores vulnerables y vulnerables severos de entre el 25% y el 40% que con la crisis energética se elevó de forma temporal a entre el 60% y el 70%. Ahora el Gobierno vuelve a reforzarlo hasta el 65% y el 80%.

Los requisitos dependen del nivel de renta de la unidad familiar (hasta 1,5 veces el IPREM en 14 pagas) y del número de integrantes de la familia, también para pensionistas con pensión mínima e ingresos inferiores a los 500 euros o beneficiarios del IMV. En esta web se puede resolver cualquier duda. En el caso de las familias numerosas, estas pueden ser beneficiarias del bono social para consumidores vulnerables, es decir, del descuento actual del 65%, independientemente de sus ingresos.

Para hacerse una idea del efecto de esta medida, estos consumidores pagaron en agosto una factura similar a la de antes de la crisis, según fuentes del Ministerio para la Transición Ecológica. Además, se eleva un 15% la cantidad de energía con derecho a este descuento (hasta los 1.587 kilovatios-hora en una unidad de convivencia de una o dos personas y hasta 4.761 kilovatios-hora en una unidad de cinco o más). Esta ayuda corre a cargo de las compañías eléctricas que, a su vez, lo repercuten a sus clientes.

Por otra parte, los beneficiarios del bono eléctrico vulnerables y vulnerables severos reciben de forma automática el térmico, una especie de 'cheque' para los meses de invierno que corre a cargo de los Presupuestos. El Ejecutivo incrementó esta ayuda de media hasta los 375 euros por hogar y la mínima a 40 euros.

Rebaja del gas para la calefacción central

El Gobierno también ha creado una nueva tarifa regulada (TUR) para las comunidades de vecinos con calderas centralizadas de gas natural que limitará hasta finales del 2023 el incremento trimestral de los precios, como ocurre ahora con la tarifa regulada parar los usuarios individuales, la conocida como TUR. Esta tarifa cubrirá el 100% del consumo equivalente a la media de los últimos cinco años y, en caso de excesos de consumo, se aplicará el precio regulado con un incremento del 25%. Esta medida, que se aplicará a partir de este invierno y hasta finales de 2023, afecta a 1,7 millones de hogares potenciales que podrían ver como su factura este invierno se reducirá a más de la mitad de lo que pagaría con las condiciones de mercado actuales, según las estimaciones del Gobierno.

El problema con la denominada calefacción central es que las comunidades de vecinos deben contratar una tarifa en el mercado libre para 'grandes consumidores' porque por su tamaño y demanda de energía --más de 50.000 kilovatios al año-- no se pueden acoger a la tarifa regulada (TUR) dirigida a los consumidores domésticos que el Gobierno 'intervino' en septiembre del año pasado para limitar el alza del precio de la materia prima, que se actualiza cada trimestre, al 15%.

Para hacerse con la nueva tarifa, las comunidades de vecinos deberán pasarse a un comercializador de referencia de gas (Energía XXI, Baser, Comercializador de Referencia, Gas & Power, Régsiti, Curenergía, Teramelcor o Energía Ceuta XXI). En caso de tener una tarifa libre, el Gobierno ha regulado el precio máximo con el que las compañías pueden penalizar a los clientes hasta el 5% del precio estipulado en el contrato por la energía estimada pendiente de suministro. Pero, además, las comunidades deberán firmar una declaración responsable con el compromiso de instalar los contadores individuales antes del invierno que viene. En caso de no hacerlo, se les aplicará el precio regulado con un incremento del 25%.

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