"Combinar oficina y teletrabajo mejora el bienestar y la productividad de la plantilla"

Saber encontrar el equilibrio entre salud y economía se convierte en estos momentos de pandemia en una ventaja de competitiva respecto a la competencia. En Roche Diagnòstics tienen claro que otro confinamiento absoluto les puede apear de la carrera que mantienen con el resto de empresas punteras en todo el mundo del sector de la bioctenología. Es por ello que el hacer y el parecer de sus oficinas, ubicadas en Sant Cugat del Vallès (Vallès Occidental), ha cambiado sustancialmente desde que llegó el virus.

"Como proveedores de productos diagnósticos, nuestra actividad en momentos de crisis es considerada esencial, y por lo tanto hemos de disponer de exhaustivos planes de contingencia que velen en paralelo para la seguridad de los empleados y por la continuidad del subministro de productos a los centros hospitalarios", según lo explica a EL PERIÓDICO la directora de personas y cultura de Roche, Emma Hernàndez.

La nueva ley del teletrabajo cubrirá a quienes ejerzan a distancia un mínimo del 30% de su jornada

Mamparas entre unas mesas y otras, uso generalizado de mascarilla, turnos de trabajo y de acceso a la cantina, teletrabajo generalizado, dispensadores de geles omnipresentes… son algunas de las prevenciones que han tomado desde la dirección para poder continuar con su actividad con la máxima normalidad posible. Una vez que acuden al centro, los trabajadores de Roche perciben desde que ponen el primer pie en la oficina todo el circuito de prevención habilitado. Antes de acceder al recinto cada trabajador es sometido a una toma de temperatura a través de una cámara térmica. La comunicación y la escenificación de los protocolos de seguridad es un elemento recomendado desde los técnicos de prevención de riesgos para mejorar la eficiencia de los mismos.

Nuevos formatos

El teletrabajo, tan extendido entre el tejido empresarial desde la llegada del virus, sigue siendo la modalidad preferente entre la plantilla de esta firma biotecnológica. Especialmente para los trabajadores considerados colectivos de riesgo, que han sido reasignados en esta empresa a tareas ‘teletrabajables’. Las dinámicas grupales que precisan de una asistencia presencial son muy valoradas por la dirección y es por ello que los trabajadores alternan las dos rutinas laborales. “Combinando la presencia física con el teletrabajo se puede conseguir un enfoque holístico que englobe una mejora del bienestar de nuestros colaboradores, una manera de trabajar más eficiente y un impacto positivo en el medio ambiente y la sociedad”, afirma Hernàndez.

La alternanza entre oficina y trabajo en esta firma se articula a través de grupos operativos de trabajadores. La dirección de la compañía ha realizado los grupos por criterios geográficos, de necesidades de conciliación y por perfiles. En este sentido, determinados trabajadores han recibido una formación específica para poder cubrir el rol de otros compañeros, en caso de posibles contagios o cambios de turno.“La flexibilidad por parte de la compañía y el compromiso de los empleados con el servicio que prestan son imprescindibles para una gestión oportuna de la actividad”, señala la directora de personas y cultura de Roche.

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