«Europa está en la periferia económica del mundo»

Europa no representa ya el eje central de la economía mundial. Ese papel lo cedió a Estados Unidos durante el siglo pasado y EEUU lo ha dejado en manos asiáticas, en las de los países ya mal llamados emergentes. Según el presidente del Cercle d'Economia, Josep Piqué, el eje central de la economía mundial se sitúa en el Estrecho de Malaca, que separa la isla de Sumatra, de la península Malaya. Con arreglo a esas coordenadas geoeconómicas, «Europa está en la periferia del mundo».

El problema no es solo que esté desplazada del eje del crecimiento mundial, sino que la ausencia de un proyecto político coherente le impide avanzar. «Cuando últimamente hemos visto que se cierran las fronteras por una crisis alimentaria. O cuando por una crisis humanitaria por los conflictos del norte de África se limita la libertad de movimiento de las personas, se pone en cuestión el proyecto europeo», dijo.

Atribuyó así la crisis del euro a la dificultad europea de avanzar hacia un modelo de integración más política. «Hay una crisis económica que nos afecta a todos, pero un proyecto de unión monetaria solo es sostenible si los desequilibrios entre los diferentes países son gestionables. Y ¿cuál es el problema de origen? Que tenemos una unión monetaria, pero no hacemos honor a lo que significa una unión económica».

Es indispensable avanzar hacia una confederación, planteó. «Y mientras que Europa no haga eso, se nos verá desde fuera cono una cosa cada vez más débil», puesto que los estados individualmente considerados, por mucho que sea la propia Alemania, no tienen posibilidad de ser relevantes en el actual concierto internacional», opinó.

MIEDO / Pero para alcanzar una Europa diferente, la posición de Alemania es fundamental. La Europa actual es una respuesta que derivaba del miedo. «El producto de tres guerras provocadas por una Alemania que quería tener posiciones hegemónicas en el conjunto del continente».

Piqué destacó que en algunos momentos se da la tentación de volver a una Europa alemana, aunque la situación actual es que, para la mayoría de las decisiones, la Unión europea debe vérselas con «una Alemania alemana». «El gobierno de Merkel toma decisiones más en clave interna que pensando en la construcción europea», dijo. «Todos estamos pendientes de la reunión de hoy. Merkel se encargó de rebajar las expectativas. Pero creo que es indispensable que se perciba un mensaje muy claro de que existe la voluntad de que el euro perdure».