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Vicky López, la joya que reluce en el campo y vive en La Masia

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Vicky López durante el partido de champions league femenina entre el FC Barcelona y Benfica en el estadio Johan Cruyff.

Vicky López durante el partido de champions league femenina entre el FC Barcelona y Benfica en el estadio Johan Cruyff. / Jordi Cotrina

Laia Bonals

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Ese brillo. Tan solo unas pocas pueden nacer con ese talento magnético. Ese que permite pensar, y hasta aseverar, en un relevo para esta plantilla que lo ha ganado todo. Vicky López (2006, Madrid) multiplica su calidad a cada partido. Cada oportunidad que Jonatan Giráldez le da la aprovecha. No solo para romper un récord tras otro, sino para aprender e incorporar cada vez más bagaje y experiencia. "Es una de las joyas que tenemos en el vestuario". No hay duda de ello.

Tuvo una infancia feliz pegada a un balón. De madre nigeriana y padre español, algunos la apodaron como la leona. Ya desde pequeña forjó su carácter, con las ideas claras y la determinación para no importarle las trabas. Perdió a los 11 años a su madre, Joy Félix, por un tumor cerebral, y su padre fue quien la impulsó y apoyó en todo momento. Jugó en equipos formativos masculinos. La ponían de defensa, por su delicadeza y toque en la salida de balón. Ella estaba feliz, hasta que un día, en la playa, una camiseta del Rayo llamó su atención.

"¿Tú jugabas en el Rayo?", le preguntó a Alba Mellado, en su momento entrenadora de las categorías inferiores del Madrid CFF y ahora jugadora de la Queens League. "¿Y tú eres Vicky López?". Se quedó de pasta de boniato. ¿Cómo la podía conocer a ella, una niña de 9 años que jugaba en un equipo de chicos en Vallecas? Lo que Vicky no sabía es que ya la había intentado fichar, pero recibió un no como respuesta. Después de ese encuentro y un par de días más de playa y conversaciones en Benidorm, llegó el sí que estampó su nombre en la camiseta del Madrid CFF.

Con el equipo madrileño debutó en Primera División con 15 años, convirtiéndose en la más joven en hacerlo. Su papel fue destacado a lo largo de la temporada y, tan solo un año después, el Barça la anunció como jugadora azulgrana. En Barcelona se asentó en el vestuario con cierta prudencia. Siempre ha sido una niña tímida y reservada, sobre todo en ambientes que le generan respeto. Eran muchos cambios a la vez: traslado de ciudad, cambio de equipo y empezaba a vivir en La Masia.

Su precocidad para romper récord es asombrosa. Con 16 años, un mes y 19 días, se convirtió en la futbolista más joven en debutar con el equipo femenino azulgrana, y también en jugar ante el eterno rival, el Real Madrid, con 16 años, tres meses y 11 días. La joven de 17 años se ha convertido en la jugadora más joven en marcar un gol en un Real Madrid- Barcelona con 17 años y 116 días, superando a Ansu Fati. Este domingo, la madrileña volverá a tener la oportunidad de medirse contra el eterno rival en el clásico de la LigaF (18h, DAZN).

Protegida y aconsejada

Además de cifras y su irrupción en las listas de señaladas, otra de las claves que permiten ver como es Vicky López es su relación con el vestuario azulgrana. Desde que llegó al primer equipo tiene una “hermana mayor”. En diferentes ocasiones así se ha referido a Salma Paralluelo, con quien ha creado una dupla entrañable. “Para mí es como mi hermanita. Está trabajando súper bien, y se lo merece muchísimo”, explicó la delantera con un brillo especial en los ojos. La aragonesa llegó la misma temporada que la madrileña y desde un principio se hicieron íntimas. El vestuario azulgrana vive un momento dulce. Una mezcla casi quirúrgica entre noveles y veteranas se entrelaza para crear un equipo irrevocable.

"Vicky tiene mucho talento. Hemos visto que en el momento en que se le da la oportunidad es otra joya que tenemos en el equipo. Le hace falta trabajo y minutos. Hay que tener paciencia con las jóvenes. Aquí hay mucha exigencia y mucha presión, pero la estamos gestionando muy bien", confiesa Irene Paredes, referente en el vestuario y que sabe a la perfección la exigencia que hay en el vestuario del Barça. "Cuando fichas a alguien, independientemente de su edad, quieres que rinda ya. Pero a la vez el staff está capacitado para regular las cargas y no cargarse a una futbolista. Son jugadoras muy jóvenes. Hace falta entrenamiento y están en ello. Está rindiendo a tope", añade.

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