Trámite y regalo: El Barça golea también en la Copa de Reina (0-6)

El Estadio Carlos Belmonte se empezó a llenar poco a poco. Albacete se paralizó para la visita del Barça. La Copa tiene estas cosas. Equipos modestos abren grandes estadios y se forman colas quilométricas para acceder a un encuentro que, más allá del resultado, es un regalo para jugadoras y aficionados. Sobre el césped hubo poca negociación en el dominio. Las azulgranas, dirigidas por Jonatan Giráldez, fueron seriamente superiores ante un Fundación Albacete (0-6) que no renunció a su manera de entender el futbol.

Pese a la resistencia estoica del Funda, que consiguió mantener la portería a cero durante los primeros quince minutos de partido, las culés ejercieron un ataque asfixiante. Las acciones de peligro se encadenaba y ponían a prueba a Alba Hoyas, guardameta del equipo manchego, que sacó un parte para retrasar lo inevitable. La primera diana azulgrana llegó a poco después. Giulia Dragoni, la perla italiana de la cantera del Barça, rompió la igualdad inicial con un auténtico golazo. Un chut potentísimo desde la frontal del área, que fue pegado al palo izquierdo de la portería, se zambulló en la red pese al intento frustrado de Hoyas de barrarle el paso.

Partido cómodo

La Masia fue determinante en el encuentro de octavos de final de la Copa de la Reina. El Barça, que se estrenaba esta temporada en la competición tras el recuerdo amargo de la anterior —en la que fueron eliminadas por alineación indebida—, se encomendó a su talento joven para resolver la eliminatoria. Primer fue Dragoni y pocos minutos después llegó el tanto de Martina Fernández. La central, que cada vez va ganando más protagonismos en el primer equipo también por culpa de la lesión de larga duración de Mapi León, aprovechó una pelota perdida dentro del área pequeña para rematar con autoridad y poner más distancia en el marcador.

Si las jugadoras jóvenes fueron determinantes, en parte, también fue gracias al liderazgo de las más veteranas. La Copa, que regala momentos únicos a equipos más modestos, también es el escenario perfecto para que las futbolistas con menos minutos y más justas de confianza se vengan arriba. Y, contra el Funda, Oshoala aprovechó la oportunidad. La nigeriana, que no está teniendo un año fácil, se desquitó segundos después del gol de Martina Fernández. Tras un recorte sobre la frontal del área, envió el balón en dirección a la portería de Hoyas y, después de tocar en la pierna de una defensa del conjunto manchego se envenenó y acabó entrando por la escuadra de la portería.

En el segundo tiempo, el cansancio hizo mella en el equipo de Primera Federación. El conjunto de Mikel Crespo vio como a medida que se restaban minutos en el marcador, sus jugadoras se iban viendo superadas por las azulgranas. Ona Batlle volvió a agujerear la portería de Hoyas con un tanto donde el remato pícaro de la lateral catalana.

Claudia Pina firmó la manita. Tras un error de Hoyas, que erró y no consiguió llegar al balón que la sobrevoló para llegar justo a las botas de Pina, que pese a estar a punto de chocar con Oshoala, envió el esférico al fondo de la portería. Mariona Caldentey, que salió desde el banquillo a veinte minutos del final, se inventó un jugadón con toques mágicos dentro del área. La mallorquina sentenció un encuentro donde el Barça jugó con calma y el Funda, pese al resultado, disfrutó de un día para su historia.