Batalla perdida, por Mónica Marchante

Desde que en agosto, antes de jugar la Supercopa, Pep Guardiola abriese el melón del calendario de los futbolistas, su grito ha sido recurrente y a él se han sumado otros entrenadores y actores del fútbol, como Mikel Arteta, Ancelotti o Simeone.

Recordaba el técnico del City que en su primera temporada en el banquillo del FC Barcelona tuvo 25 días para preparar su primer partido oficial, mientras que ahora apenas tiene 4 o 5 días. "Te hacen ir a Asia, a EEUU con partidos fortísimos, derbis, partidos grandes…y la gente cae y seguirá cayendo porque 'show must go on' y si Courtois no está pues ya habrá otro y sino está Kevin (De Bruyne) pues ya habrá otro “

Desgraciadamente, las declaraciones de Guardiola aquel día de agosto en Atenas fueron premonitorias de un otoño-invierno cargado de lesiones en la Liga. Gavi, Vinicius, Camavinga, Oyarzábal, Alaba son algunos de los afectados por lesiones en cuatro meses de liga en Primera, lo que ha hecho saltar las alarmas y buscar la relación entre un calendario saturado con esta plaga de lesiones, y en concreto las de cruzado.

Aceptando que no será uno sino la suma de varios factores, parece evidente que entrenar poco y jugar demasiado, diseñar pretemporadas donde pesa más la necesidad de recaudar que de entrenar, saltar de continente a continente en pocos días, alterar el descanso y la programación racional de entrenamientos de un profesional , son factores que, sumados a un calendario saturado de partidos, dan como resultado una plaga de lesiones que afecta a toda Europa.

Solo una solución dio Guardiola en agosto a todo este disparate, "es una batalla perdida hasta que los jugadores se planten y digan: no jugamos”.

Pues bien, miremos a los jugadores y en concreto a algunos de los que han sufrido esas lesiones en el parón navideño. Vinicius voló a Los Angeles (EEUU) para disfrutar de la NBA. Lo mismo hizo Camavinga. Haaland voló a Arabia Saudí igual que Joao Felix. Mbappé eligió Laponia, y Asensio voló a Puerto Rico. Son solo algunos ejemplos.Tiene razón Guardiola, es una batalla perdida. El descanso no parece una prioridad ni siquiera para muchos de ellos.