Xavi se alegra porque se insinúa su Barça

Son dos partidos. Pero son los dos mejores partidos de su Barça. Son dos partidos y dos goleadas idénticas (5-0 al Betis; 5-0 al Amberes), pero lo que realmente le reconcilia a Xavi es el fútbol que proyectó su equipo. El fútbol de los centrocampistas, no el de hormigón armado que exhibió el curso pasado, acostumbrado a la victoriosa, pero sufrida rutina del 1-0.

Son dos partidos, dos goleadas y la sensación, admitida por el propio técnico, de que ha encontrado el camino adecuado. Es el mismo dibujo táctico, sostiene Xavi, pero no es lo mismo porque el Barça se ha llenado de centrocampistas (De Jong, Gündogan, Gavi) con aire ofensivo, unido a almas libres (João Félix) que se vienen a la sala de máquinas para conectarse con la pelota, coincidiendo con laterales mentirosos, como João Cancelo, que son de todo (interior, volante, falso extremo….), menos es un defensa puro.

Darle continuidad

"Estamos en el mejor momento desde que soy entrenador. Son los dos mejores partidos", proclamó orgulloso Xavi, consciente de que el largo proceso (en noviembre hará dos años de su llegada) empieza a dejarle en la ruta adecuada. Y no solo se limita al Barça de los ‘Joãos’ sino que hay mucho más, aunque, como diría Cruyff, "un palomo no hace verano", por lo que el técnico exige darle continuidad y estabilidad a esa ilusionante línea. De pronto, el equipo entiende, con la inclusión de tres piezas nuevas, como ocurrió en la Champions, algo que le tenía torturado tácticamente.

"Gündogan es un regalo caído del cielo"

Xavi

— Técnico del Barça

Con Gündogan ("es un regalo caído del cielo", proclamó Xavi), João Félix ("le he dicho que cuánto más sencillo juegue, más goles marcará”, reveló) y con Cancelo (“vienen de un entrenador que quiere jugar de la manera que queremos jugar nosotros, que es Guardiola”, aseguró), el Barça ofrece síntomas de evolución en su fútbol. J

Jugadores enseñados

Jugadores, como Gündogan y Cancelo, que han pasado antes por las manos de Pep. "A Gündogan no hace falta decirle nada, cómo juega a fútbol, cómo entiende cuándo hay que saltar a la presión del central, cuándo tiene que jugar fácil. Es una maravilla ver jugar a Gündogan. También a Cancelo", confesó el técnico azulgrana.

Jugadores todos ellos que ya vienen más que enseñados. Jugadores, junto a João Félix, que han tenido impacto inmediato, provocando incluso que hayan alterado el rostro del equipo.

"Tengo la sensación de que estamos jugando mucho mejor a fútbol", subrayó Xavi, ensalzando la capacidad del Barça para encontrar ahora "lo que nos faltaba". ¿Y qué le faltaba? "Nos faltaba juego interior, tener más paciencia, jugar por dentro para luego si se cierran saber jugar por fuera", añadió el técnico.

"Tengo la sensacion de que estamos jugando mucho mejor a fútbol", admite Xavi

Todo eso que tanto echaba de menos en los últimos meses, aunque ahora lo está hallando. Al menos, en estos dos partidos, donde también ha sellado la portería de Ter Stegen a cero. "El nivel del equipo sube cuando juega Gündogan", sentenció Xavi. "Cancelo lo entiende muy bien y el mismo Koundé filtra pases interiores de gol. Incluso el mismo Andreas", apuntó en referencia a Christensen, elogiando la química que hay en esa pareja de centrales.

La conexión con Lewandowski

"Al poner un mediocampista más en función del rival y un lateral que va por dentro también nos ayuda". No solo eso. Ese movimiento de piezas también incluye a Lewandowski, quien antes, al no recibir balones, abandonaba desesperado su posición dejando un desequilibrio más que evidente. "Ahora, Robert es más posicional, tiene más paciencia, los interiores también deben tenerla. João Félix lo está entendiendo bien", contó Xavi.

No necesita moverse tanto el delantero polaco porque sabe que el balón le llegará. Y porque sabe, además, que tiene más socios y, sobre todo, más cerca: João Félix, Gündogan, Gavi, Cancelo, incluso, Raphinha, Lamine Yamal, el debutante más joven en Champions de la historia del Barça, o Ferran Torres, el extremo que se mueve por la derecha, o Balde, lateral profundo que vive más en el área contraria que en la propia.

Empezó seco Lewandowski, con cero goles en 180 minutos. Y ahora nada en la abundancia firmando cuatro goles en los cuatro últimos encuentros. "Estamos en el buen camino, pero hay que darle continuidad", dijo un prudente Xavi.