Laporta intenta desbloquear el aval para tomar posesión

Joan Laporta intenta desencallar el aval para ser presidente del Barça. Tras la marcha de Jaume Giró, Eduard Romeu, vicepresidente de Audax Renovables, y Joan Soler, presidente del Vilafranca FC, debían respaldar con su rúbrica parte de los 124,6 millones que se deben depositar en la LFP este martes para que el presidente pueda tomar posesión el miércoles en el césped del Camp Nou. Por la tarde parecía que Banc Sabadell y JB Capital Markets habían resuelto el peliagudo tema del aval. La entidad catalana solo había aceptado bienes inmobiliarios. La entrada en juego de Audax parecía desbloquear el trámite, aunque a última hora de la noche no se había cerrado.

Audax es una empresa de renovables de Badalona en la que Romeu es el vicepresidente y en la que en diciembre entró como accionista Goldman Sachs. Cabe recordar que esta última empresa cerró con la anterior junta azulgrana un acuerdo de 815 millones a devolver en 25 años desde el momento de la conclusión de la reforma del Camp Nou (725 por el coste de la obra y 90 para intereses más costes financieros iniciales). Un contrato que Laporta dijo en campaña que estudiaría.

Solución Audax

Una de las claves de la configuración de la nueva directiva era alguien que no formará parte de ella: el dueño, fundador y primer accionista de Audax, José Elías Navarro, «Audax no puede poner dinero en el Barça al ser una empresa cotizada, es totalmente imposible -comenta a este diario-. No tiene sentido que ponga mi dinero en un proyecto que no controlo o en el que no participo. Puedo ayudar a nivel de gestión o conocimiento, pero materialmente no puedo entrar en la junta del Barça porque no tengo la antigüedad necesaria».

Aunque formalmente no pusiera dinero de su bolsillo ni estuviera en la junta, habló con Laporta para cederle a su mano derecha tras la espantada de Giró. La situación financiera actual del Barça requiere de soluciones creativas que desbloqueen la parálisis de ingresos. La solución Audax venía a ajustarse de manera adecuada a la situación, con la experiencia de Romeu en contratos de futuros.«Romeu aporta su patrimonio y es capaz de avalar su parte dentro de la junta, el problema es que no todos los integrantes del equipo de Laporta pueden avalar con su dinero el proyecto», explica Elias Navarro. A última hora se había encallado el pacto entre el Audax y el Barça, poniendo en el aire la entrada la figura de Romeu como vicepresidente económico.

Además de Romeu, el otro nombre nuevo entre las firmas era el de Joan Soler, el presidente del Vilafranca. El dirigente figuró en la precandidatura de Jordi Farré. Si se desbloquea el tema del aval, el miércoles estará presente en la toma de posesión de Laporta, que se realizará a las 18.00 horas en el Camp Nou en un acto con 350 invitados, con familiares y allegados de los nuevos dirigentes. Sería un par de horas después del traspaso de poderes con la gestora de Carles Tusquets y antes de empezar a repartirse las carteras en la junta ampliada tras la salida de Giró, donde Rafa Yuste ocupará la vicepresidencia deportiva y Josep Cubells será el encargado del baloncesto, como ya ocurrió en el anterior mandato de Laporta.

Xavi se moja y apuesta por Jan 

Una etapa pasada que Xavi ensalza.  «Es el mejor presidente que tuve en el Barcelona», comentó. El excapitán, que evitó mojarse por Víctor Font en campaña, está convencido de que Laporta reflotará el club. «El Barcelona volverá seguro, tanto deportiva como económicamente. Ahora hay algunos problemas por resolver, pero estoy seguro de que Laporta los puede arreglar. Estoy muy contento por él».