El último susto azulgrana

El Leo más catalán

La pancarta 8 En el minuto 20 de la primera parte se desplegó un mensaje en el gol sur del Camp Nou a favor de la escuela en catalán.

La pancarta 8 En el minuto 20 de la primera parte se desplegó un mensaje en el gol sur del Camp Nou a favor de la escuela en catalán.

MARCOS LÓPEZ
BARCELONA

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Messi se ha hecho adulto. Y no por su reciente paternidad (Thiago, su hijo, tiene poco más de un mes), sino porque ya no esquiva asuntos que antes hubiera burlado como si fueran defensas en el campo. Ahora, no. Ahora Messi, con 25 años, tiene un discurso propio, contundente y sereno, pese a que su tradicional tono de voz bajo, tímido casi siempre, invita a pensar lo contrario. Ayer, por ejemplo, todavía asustado porque el dolor de su rodilla izquierda le hizo pensar en lo peor, Messi quiso unirse a las voces de Tito Vilanova, el técnico, y de Carles Puyol, el capitán, que se escucharon tras el comunicado oficial divulgado por el Barça en el que reinvidicaba «de manera enérgica la lengua catalana y el modelo de inmersión lingüística vigente en Catalunya en los últimos 34 años».

A Messi no se le escuchó citar al ministro Wert. Ni tampoco habló de lo que plantea el Gobierno español en el borrador de Ley Orgánica para la Mejora de la Calidad Educativa (Lomce), al que se opone la Generalitat por considerar «inadmisible» el tratamiento que recibe. De nada de eso habló Messi. Pero en apenas 30 segundos, y ya casi al final de su comparecencia en la sala Roma del Camp Nou, el mismo estadio que se quedó en silencio la noche del miércoles cuando le vio irse en camilla al vestuario, lleno de dolor, Messi lanzó su mensaje más catalán.

#somescola

No utilizó un tuit para expresar sus ideas, como Puyol, quien fue el primero que expresó públicamente sus ideas sobre tan polémico asunto: «#wertgonya #somescola». Así de contundente se mostró el capitán azulgrana, quien luego, tras el partido contra el Benfica, insistió en ese mensaje: «No hablo de política, solo defiendo nuestra cultura y nuestra lengua». Luego, el Barça se posicionó como institución. «La lengua, como nuestro club, es un elemento de integración que permite identificarse con el país, al margen de procedencias y sensibilidades», explicó en un comunicado oficial. «La lengua catalana y su enseñanza en las escuelas forma parte de nuestra identidad y es un elemento esencial para la cohesión social y la convivencia de nuestro pueblo». Después, habló Tito Vilanova, ya como entrenador del Barça y, al mismo tiempo, como catalán de L'Empordà. «Tuve que estudiar todo en castellano y espero no volver 30 años atrás».

Un rosarino en Barcelona

Escuchados todos ellos, Messi, un niño nacido en Rosario hace 25 años que llegó en el 2000 a Barcelona, también se dejó oír. Habló, como es habitual, en castellano, con numerosas referencias en su lenguaje -«cancha, vos, acá..»- a esa Argentina que nunca olvida aunque casi lleve más tiempo en Catalunya. «Yo, desde que llegué acá, estudié, crecí y aprendí en catalán. Nunca tuve ningún problema, todo lo contrario. Cuantos más idiomas sepa un chico y crezca con ellos, mucho mejor para la educación», dijo sin regatear ningún asunto. «Hay que agregar, más que sacar cosas. Cuanto uno más sepa, mejor para las personas», concluyó el Messi más catalán.