Nuevos impagos de grandes propietarios asfixian a los comercios del Llobregat Centre de Cornellà

La creciente demacración externa del extinto centro comercial Llobregat Centre de Cornellà de Llobregat es directamente proporcional al engrosamiento de la deuda por impagos de sus propietarios mayoritarios, que los pequeños comercios se ven obligados a asumir incluso medio año después del 'cerrojazo' del recinto las pasadas Navidades.

Tal es la asfixia de los pequeños comerciantes que estos están convencidos, tal y como aseguran varios de ellos a EL PERIÓDICO, de que los impagos forman parte de una "operación orquestada" por el propietario mayoritario del centro comercial, el fondo de inversión inmobiliaria Comercial Inversora Cornellà Sur SL, para depreciar los locales comerciales y acabar comprándolos a precio de saldo, con propósito desconocido -incluso por parte del Ayuntamiento de Cornellà- en el espacio que ocupa todavía el centro comercial. Este diario ya adelantó que los comercios reclamaron en los tribunales a Comercial Inversora, mercantil con la que no ha sido posible contactar, una deuda de un millón de euros.

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Del colorido cartel del histórico establecimiento comercial ya sólo queda el poso de la ennegrecida silueta que las letras han dejado tras casi 30 años de servicio a Cornellà y a municipios aledaños como L'Hospitalet, Sant Boi o Esplugues. Esa desangelada apariencia se traduce a la práctica en que únicamente se mantienen abiertos al público un KFC y un pádel, que aprovechan sus accesos externos para seguir operativos al tiempo que el resto de locales permanecen cerrados desde que el centro comercial echó el cierre.

El cese de actividad y por consiguiente de ingresos, sin embargo, no ha supuesto que los pequeños comercios (unos 40, que aglutinan un 10% de la propiedad) dejen de pagar su parte proporcional de los gastos de comunidad -consumo de agua, eléctrico o seguridad, por ejemplo- a los que siguen obligados, cada uno en función de su parte alícuota de la propiedad del centro, como integrantes de la Comunidad de Propietarios del centro con respecto a la cual son responsables.

Ese gasto de los pequeños comercios ya se venía viendo incrementado por los impagos de Comercial Inversora Cornellà Sur SL, el fondo de inversión inmobiliaria que ostenta la propiedad mayoritaria (50,05%) del Llobregat Centre y al que los locales minoritarios reclamaron en los tribunales una deuda de alrededor de un millón de euros, tal y como adelantó en diciembre del pasado 2022 EL PERIÓDICO.

La situación financiera no es precisamente halagüeña para los comerciantes minoritarios a mediados de este 2023. En primer lugar, porque los impagos de Comercial Inversora se han ido sucediendo y la deuda asciende ya a un total de casi 2,5 millones de euros, 1,5 M de los cuales corresponde a la deuda como tal y lo restante a intereses devengados, tal y como han confirmado a EL PERIÓDICO fuentes conocedoras de primera mano de la realidad del Llobregat Centre.

En segundo lugar, porque ya no es únicamente Comercial Inversora la que impaga: también lleva haciéndolo cuatro meses -desde el pasado mes de marzo- el segundo mayor propietario del centro, la mercantil Joparny SL -cuenta con un 23% de la propiedad del Llobregat Centre-, que fue adquirida por Hawkins Retail Properties SL en abril de este 2023. Entre ambas adeudan a la Comunidad de Propietarios del Llobregat Centre un total de casi 67.000 €, unos 60.000 € de los cuales en concepto de gastos de comunidad y lo restante de intereses, tal y como consta en las actas de las juntas de propietarios a las que ha accedido este diario.

Pequeños comercios con los que ha contactado este diario hablan de una "situación límite de asfixia" al ver incrementadas en un 150% sus cuotas a consecuencia de tener que asumir la provisión de impagos aprobada este julio del 2023 en un nuevo presupuesto al que ha tenido acceso este diario.

El incremento es observable en un propietario que solicita anonimato: si hasta la fecha su factura anual ha sido de 2.000 €, a estos se le deberán sumar a partir de este mes de julio otros 5.000 € en concepto de provisión de impagos (un total de 7.000 € anuales). Otro ejemplo: a una factura anual de 1.850 € de gastos de comunidad se le suman a partir de ahora otros 4.440 € (un total de 6.290 € anuales). A lo largo del 2023, hay previstos gastos anuales de pequeños comerciantes -en función de su porción de propiedad- de miles y miles de euros que, por el cese de actividad del centro, no se corresponden con ingresos.

Pese a admitir la creciente deuda por impago del propietario mayoritario, Elisa Simón, presidenta de la Comunidad de Propietarios del Llobregat Centre, matiza que aun así "la cuota anual ha bajado un poco". Simón se refiere a que los gastos ordinarios de la comunidad -la seguridad, por ejemplo- se han reducido al mínimo, si bien las facturas son similares a las de antes porque el importe de lo que antes eran gastos lo es ahora de provisiones por impagos.

"Estamos muy preocupados"

Un hecho clave que lleva a los comercios minoritarios a hablar de "operación orquestada" es la relación entre los recientes impagos de Joparny SL y su compra a cargo de otra SL, Hawkins Retail Properties, de reciente creación (marzo de este 2023) y dedicada al "arrendamiento de locales comerciales", según se desprende del Registro Mercantil. Los comercios con los que ha contactado este diario temen que sea el paso previo a que Comercial Inversora pueda llegar a comprar a Hawkins Retail Properties su local y engrosar así su proporción de propiedad del Llobregat Centre.

La presidenta Simón corrobora que Hawkins ya ha hecho explícita su voluntad de vender su local, "aunque todavía no sabemos a quién", precisa. Además, Simón insiste en que, pese a los impagos de cuatro meses de Hawkins SL (antes Joparny SL), "todavía no podemos asumirlo como deuda ya que nos han dicho que pagarán, quizás cuando vendan su local", apostilla Simón, reconociendo que muchos pequeños comerciantes "estamos muy preocupados".

Un propietario minoritario que solicita anonimato asegura que, cuando compró su local en la inauguración del centro comercial, el metro cuadrado costaba más de 2.500 €. "Actualmente me dicen que está a unos 400 €/m2 y bajando", explica, asumiendo que el valor en caída libre de su local (sin actividad y en un centro comercial cerrado) beneficia a Comercial Inversora: "Es un 'fondo buitre' que quiere quedarse todos los locales a precio de ganga y en el futuro construir y explotar económicamente el terreno del centro comercial", explica el comerciante.

El alcalde de Cornellà de Llobregat, Antonio Balmón (PSC), ha reiterado desde el 'cerrojazo' del Llobregat Centre su "preocupación" por la situación de los pequeños comerciantes del centro comercial, al tiempo que el Ayuntamiento de Cornellà se ha desmarcado de la cuestión al tratarse de un centro comercial de propiedad privada ajena al consistorio.

Pese a reconocer "inquietud por el desconocimiento de las intenciones detrás de la decisión" de Comercial Inversora, fuentes municipales de Cornellà han negado en todo momento la concurrencia de cualquier solicitud de recalificación de los terrenos del Llobregat Centre para realizar promociones inmobiliarias, uno de los grandes temores de los comerciantes del centro. De hecho, desde el consistorio aseguran que Comercial Inversora ni se ha puesto en contacto con la administración local.

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