LOS RESTAURANTES DE PAU ARENÓS
El Norte es el camino
Pau Arenós
Coordinador del canal Cata Mayor
Periodista y escritor, con una quincena de libros publicados, entre ellos, novelas y cuentos, y media docena de premios, como el Nacional de Gastronomía. Ha estado al cargo de las revistas 'Dominical' y 'On Barcelona'. Entre las últimas publicaciones, 'Nadar con atunes y otras aventuras gastronómicas que no siempre salen bien' y 'San Elvis, ruega por nosotros. Crónicas de un tiempo irreverente'
Pau Arenós
[Fernando Martínez-Conde ya no forma parte de este restaurante]
Norte, una buena dirección. Es la que han tomado Lara Zaballa, Fernando Martínez-Conde y María González.
Norte es blanco y polar, con un cartel de bombillitas, que señala el horizonte. Es el letrero que creerías encontrar en un pub de Laponia al aparcar los renos.
De Vigo, de Burgos, de Bilbao. Son los puntos cardinales del trío, una filósofa, una historiadora del arte y un periodista que se conocieron en el Roca Moo. Una cocina abierta merece una educación abierta.
Barcelona pone en marcha los restaurantes de garaje como alternativa a la crisis de caracola, en la que no adivinamos el final: Norte, Nuvola, La Pubilla, Blavis, Vint-i-un plats, Betlem.
Norte es una barra, donde María transita vertiginosa, seis mesitas en una caja de ambulatorio, un altillo que debería estar disponible en otoño, una terracita para los últimos días de septiembre y las primeras hojas.
En proporción con el tamaño, sirven platillos, tapas, nanococina popular sin agobios vanguardistas. Abren a las 7.30 para desayunos contundentes y cierran los fines de semana, según una liturgia obrera que están siguiendo los nuevos cocineros.
Estrenaron, discretos, el 11 de julio y eso que Lara y Fernando guardan una agenda de magnates de la comunicación. Fueron redactores de la revista 'Apicius' y se relacionaron con los chefs más poderosos e intimidantes del planeta.
Al final de la primera visita, Lara, nerviosa, hizo una pregunta desconcertante y abrupta: «¿Qué ha estado mal?». Y la respuesta, sincera, fue: nada, más allá de la poca presencia del bacalao en la croqueta («lo estamos debatiendo», asintió, consciente) de esponjoso corazón y costra dorada. De principio a final, el tapeo fluyó como un ejercicio de cartomagia, sin que acertáramos a ver el truco.
Oh, maravilloso pan del Forn de la Trinitat; sardinas escabechadas con la acidez recomendable; tortilla con tiras de tocino y judías verdes («es la del Cañete»); arroz con calamarcitos (era el plato del día y debería ser fijo) y conguito, chocolate y cacahuete, retroceso a la infancia, que es nuestro norte. Incluso el café estaba bueno. Relajaos, estáis preparados para el viaje.
María promete más vinos por copas –sería coherente con la oferta de Liliput–. Apuramos el Joan d’Anguera del Montsant con gusto y un Ribera del Duero, el Nuestro.
Al día siguiente, ensaladilla rusa/rosa (con remolacha), gazpacho con sardina ahumada (jo, qué sardina), ensalada de hortalizas ecológicas –lo eco es un mantra de la casa–y codorniz en escabeche, carrillera de ternera con puré. Debería ser a voces el secreto de cerdo ibérico con 'chutney', melocotón y piparra, vasco-andaluz-indio, otros nortes.
Fernando dice: «Esta cocina huele un poco a norte».
Lara dice: «Pienso más en carne guisada que en 'fricandó'».
María dice: «Es la cocina de la 'amatxo'».
Entonces estamos todos de acuerdo: el norte es el camino.
- La FGE sustituye a la fiscal de Madrid por el fiscal superior de Extremadura en la querella de la pareja de Ayuso contra dos fiscales en su caso de fraude
- Este domingo puedes visitar el bosque del Prat que solo abre 10 veces al año
- ¿Qué supermercados triunfan más en Catalunya? La 'pole position' de la gran distribución alimentaria se distancia de su competencia
- 30 frases e imágenes para felicitar el Día de la Madre 2023
- Muere Carola Miró, la esposa del expresidente de la Generalitat Quim Torra
- Un muerto en un tiroteo al lado de la parada de metro de Maresme-Fòrum de Barcelona
- Catalunya se encomienda a las próximas lluvias y al deshielo para dejar atrás la emergencia por sequía
- El destino de Daniel Sancho se debate ahora entre la cárcel amable de Samui y la despiadada de Bangkok