Retrato robot

El 9% de los turistas de Barcelona acuden a espectáculos de música, teatro o cine

El Observatorio del Turismo en Barcelona atribuye a este perfil una estancia más larga y un gasto diario superior a la media

Barcelona ganó 2.359 camas turísticas en 2023 y ya supera las 152.000

A la caza del extranjero: Barcelona entra en el mapa de los grandes espectáculos internacionales

Público de un concierto del festival Share Festival Barcelona 2023

Público de un concierto del festival Share Festival Barcelona 2023 / Zowy Voeten

Meritxell M. Pauné

Meritxell M. Pauné

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Barcelona no tiene un Broadway o un West End, pero ha entrado por otras vías en el circuito del turismo de escenarios internacional. Existe un público global al que no le importa –¡todo lo contrario!– viajar a otro país para acudir a un festival de música, un estreno de ópera, un montaje teatral… El escenario pasa a formar parte del destino y ambos se retroalimentan. La capital catalana tiene aún poco estudiado este perfil de visitante, pero los pocos datos existentes apuntan que crece y que su gasto es superior a la media.

El Observatorio del Turismo en Barcelona (OTB) publicó este septiembre un informe monográfico sobre el “turista escénico” en la capital y en el conjunto de la destinación. La etiqueta agrupa a todos los visitantes que hayan asistido conciertos, festivales de música, teatro o cine durante su estancia. En 2022 fueron un 9% del total en Barcelona ciudad y un 7,6 en la región. El año anterior eran el 6,2% y el 5,8% respectivamente, aunque los flujos turísticos todavía estaban muy influidos por la pandemia.

Los datos proceden de la última encuesta de perfil y hábitos de los turistas de la destinación (2022), que revela a grandes rasgos quiénes son y qué hacen en Barcelona estos visitantes escénicos. Espóiler: los jóvenes festivaleros ganan por goleada a las familias con entradas en platea. Una hegemonía que se corresponde con una oferta de conciertos mucho más  guiri-friendly que la cartelera teatral local.

Los datos disponibles desmienten ampliamente que sea un turismo de bajo coste. Dos elementos despiertan especial interés en el sector: los turistas escénicos realizan estancias más largas (6,3 noches, frente a 4,9 del promedio general) y gastan más por persona y día (96,60 euros frente a 84,42). El año pasado el 58% durmió en alojamientos turísticos, el 19% en casa de algún amigo o familiar y el 13% en un camping.

Treintañeros universitarios

El 66% son hombres, el 80% tienen estudios universitarios y el 60% trabajan como asalariados. Tienen de media 32,7 años y, de hecho, solamente un tercio tiene más de 34 años. Casi 9 de cada 10 son extranjeros (68% europeos) llegados en avión. Un 34% vino a la ciudad solo, un 32% en pareja y un 24% con amigos. Tres cuartas partes vinieron a Barcelona por ocio y en general ponen muy buena nota a la ciudad (un 8,81 sobre 10).

La familiaridad con la que este público se mueve por Europa propicia que sean viajes planificados con poca antelación: el 64% contrató el alojamiento con menos de un mes de antelación y dos de cada diez lo hizo la semana previa. Casi siempre por internet. Una vez en el destino, se desplazan por la ciudad en metro (65,3%), a pie (58,3%), en taxi (33,3%) o en autobús (32,5%). Para el 46,8% es su primera visita a Barcelona.

La estacionalidad se corresponde con el perfil y la oferta: los meses estrella son mayo, junio y julio, temporada alta de grandes festivales de música al aire libre. En junio concretamente suponen un 16,6% del total de turistas. Por el contrario, de enero a abril de 2022 su presencia quedó por debajo del 9% de media. Su presencia en la región, en cambio, es más alta en abril y de agosto a octubre, en virtud de una mayor proporción de visitantes catalanes y españoles (43,3%).

En qué gastan y qué visitan

El evento cultural o eventos a los que hayan asistido no copan toda la estancia. Les queda tiempo, a tenor de sus respuestas en la encuesta anual del OTB, para ir de restaurantes (el 97% así lo afirmó en 2022), pasear relajadamente por la ciudad (el 92%) y realizar alguna visita cultural (87%) que muy probablemente tenga que ver con la arquitectura, elemento que más valoran de la destinación. Lo que menos les gusta, por este orden, es el ruido, la contaminación y la limpieza. Opiniones y actividades muy similares a las del turista tipo.

Dos turistas jóvenes en las escaleras de la Catedral de Barcelona, en verano de 2023

Dos turistas jóvenes en las escaleras de la Catedral de Barcelona, en verano de 2023 / Ángel García Martos

Un 12% de ellos han incorporado a su planning una escapada fuera de la capital, tendencia aún modesta pero esperanzadora dado que los day-trips son una asignatura pendiente crónica del sector. ¿Y a qué destinan el presupuesto? El mayor gasto es el desplazamiento hasta la ciudad (431,76 euros), seguido del alojamiento (63,42 euros por persona y día). El resto se va a comida y bebida, entretenimiento (donde se incluiría el espectáculo al que han asistido), compras y transporte interno.

Más detalles, en 2025

El retrato robot del turista escénico de Barcelona es aún borroso. Por ello, el Observatorio del Turismo en Barcelona (OTB) prepara este 2024 un estudio pormenorizado sobre el segmento, que por primera vez segregará el público de cada ámbito cultural. Los resultados los dará a conocer el año que viene. Permitirán confirmar la hegemonía actual de la industria musical y vislumbrar el potencial del resto de artes para captar espectadores internacionales.