Barcelona crea un nuevo portal de datos que aspira a ser más amplio y sencillo

En 2023, había más niños menores de cinco años en Barcelona (eran 29.722) que niñas (se contaban 27.923). En cambio, estaban censadas más mujeres que superaban los 100 años en la ciudad (tantas como 751) que hombres de edad tan provecta (se contabilizaban 161). Es tan solo uno de los detalles que desmenuzan la ciudad y que se hallan echando un vistazo al nuevo portal de datos del Ayuntamiento de Barcelona.

La web -que puede consutarse aquí- recopila estadísticas que el consistorio genera -desde el padrón a los resultados sobre transporte público o de los barómetros de opinión- como las que provienen de otras instituciones públicas o entidades privadas que también documentan la evolución de la capital. El abanico de información al alcance es amplio: permite saber cómo han fluctuado las precipitaciones en la ciudad -se pueden revisar desde 1786 para estudiar el impacto de la sequía y el cambio climático- o el consumo con tarjetas de crédito en comercios de la urbe en los últimos años.

Ante todo, la web procura resultar “mucho más fácil para los usuarios”, ha destacado el director de la oficina municipal de datos, Màrius Boada. “Hemos sido un poco disruptivos en relación a la ortodoxia de cómo se dan los datos habitualmente”, ha afirmado el responsable durante el acto de la presentación de este lunes en el Ayuntamiento. “Debemos hacer más fácil encontrar la información para la mayoría de usuarios, que la web se pueda ver bien en el móvil, lo que es muy difícil cuando tratamos datos, y hemos creado un espacio personal donde el usuario puede montar la web como le interesa para recibir las comunicaciones”, ha desgranado.

Boada ha recalcado que la flamante web en catalán, castellano e inglés no es un repositorio de “datos en bruto”, sino que incluye “una parte analítica”, con estudios que interpretan el contenido de las estadísticas. “Hemos agregado contenidos de diferentes niveles. Por ejemplo, cuántos robles hay en el Eixample, dónde están y un informe sobre la salud de los robles”, ha detallado el director de la oficina de datos. Ha defendido que se trata de brindar una “visión de 360 grados” sobre la ciudad, que abarque desde la demografía y la economía al trabajo, la vivienda y los transportes.

Asimismo, ha indicado que la web está preparada para adaptarse a la Inteligencia Artificial y aspira a actualizar los datos con más frecuencia de lo que hasta ahora era habitual. “Ahora podemos saber cuál es el precio del día de la electricidad, el coste de la gasolina, saber el tráfico que hay en Barcelona y compararlo con otros momentos... Y con el padrón, si hasta ahora eran datos anuales, ara tenemos datos mensuales que nos indican los movimientos de la ciudad, pero también por distrito, barrios y sección censal”, ha explicado. 

El alcalde de Barcelona, Jaume Collboni, ha subrayado el valor de los datos para mejorar la gestión pública. “No creo en el pensamiento mágico de que resuelva la forma de hacer política municipal, donde es muy importante el contacto, la intuición y la información directa del ciudadano, pero en movilidad, usos comerciales, en reducción de pisada de carbono o en gestión del agua podríamos ser más rápidos y eficientes si tuviéramos más datos y tener la posibilidad de hacer un mejor uso”, ha opinado. 

“Hacemos demasiado uso de la intuición del que sería recomendable, cuando lo podríamos objetivar si tuviéramos el uso de datos más ordenado y sistematizado”, ha insistido Collboni. “Instituciones como el Ayuntamiento tienen cada vez más datos, y más desordenados si no los ordenamos”, ha advertido Boada. “Aportan valor si somos capaces de tenerlos ordenados y analizarlos rápidamente”, ha remachado.