1.243 millones de euros

PSC, Junts, Comuns y ERC apoyan al unísono el Presupuesto 2024 de la Diputación de BCN

Las nuevas cuentas, marcadas por la incertidumbre global y nacional, logran el respaldo prácticamente unánime del Pleno

PREVIA | La Diputación de Barcelona aprobará un Presupuesto 2024 "municipalista" y marcado por la incertidumbre

De izquierda a derecha: DIonís Guiteras (ERC), Lluïsa Moret (PSC), Marta Farrés (PSC) y Candela López (ECP), durante un Pleno de la Diputación de Barcelona.

De izquierda a derecha: DIonís Guiteras (ERC), Lluïsa Moret (PSC), Marta Farrés (PSC) y Candela López (ECP), durante un Pleno de la Diputación de Barcelona. / Jordi Otix

Àlex Rebollo
Manuel Arenas
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La Diputación de Barcelona (DIBA) ya tiene en marcha su hoja de ruta financiera para el próximo 2024. El Presupuesto 2024 ha salido adelante este jueves 30 de noviembre en un pleno en el que ha logrado un apoyo prácticamente unánime de los 51 diputados que lo integran -el único voto contrario ha sido el de Vox-, obteniendo así el respaldo tanto del gobierno cuatricolor (PSC, ERC, Comuns y díscolos de Junts) como de formaciones en la oposición como el PP, Tot per Terrassa o el resto del grupo de Junts.

1.243,78 millones de euros es el montante al que ascienden las nuevas cuentas de la DIBA, administración con la cuarta dotación presupuestaria más elevada del sector público catalán (tras Generalitat, Ayuntamiento de Barcelona y Área Metropolitana de Barcelona) que ofrece apoyo económico y técnico a los 311 municipios de la provincia de Barcelona.

"Con nuestro presupuesto queremos contribuir no sólo a acompañar a las ciudades de la provincia, sino a hacer país", ha reivindicado durante la sesión plenaria Pilar Díaz (PSC), diputada que lidera el área de Servicios Generales de la DIBA y alcaldesa de Esplugues de Llobregat, quien ha reivindicado que la DIBA apruebe sus cuentas "en tiempo y forma", de modo que se siga "dando solidez y estabilidad a los municipios".

En la misma línea se ha expresado la presidenta de la Diputación, Lluïsa Moret (PSC), en una rueda de prensa que ha tenido lugar una vez ha finalizado el Pleno. La también alcaldesa de Sant Boi de Llobregat ha celebrado el apoyo casi unánime a los presupuestos, fruto, ha dicho, de un "trabajo intenso" y de la "búsqueda de consensos". "Tenemos muy claro que, más allá de los matices ideológicos y políticos, la prioridad es el bienestar de los ciudadanos y que los ayuntamientos tengan los recursos necesarios", ha concluido.

Pleno de la Diputación de Barcelona (DIBA)

Pleno de la Diputación de Barcelona (DIBA) / Jordi Otix

Presupuestos de consenso

En la rueda de prensa también han intervenido representantes de los otros partidos del gobierno, los cuales se han deshecho en elogios hacia el trabajo llevado a cabo por el área de Servicios Generales de la DIBA y la diputada Pilar Díaz por lograr este consenso de cara a al Presupuesto 2024 de la administración supramunicipal.

El vicepresidente segundo, Dionís Guiteras (ERC), ha señalado que, aunque se trata de un presupuesto "de transición de un mandato a otro", ya "hemos reflejado nuevas formas de trabajar" y ha reivindicado la creación por primera vez de un área de Igualdad y Feminismo.

Por su parte, la vicepresidenta tercera de la DIBA, Candela López (En Comú Podem), ha aseverado que el Gobierno de la Diputación de Barcelona tiene como prioridad el "desarrollo de políticas innovadoras" y "poner a las personas en el centro". Además, ha hecho gala de ser la "administración del país que más invierte en energías renovables".

Por su parte, Marc Castells (Junts per Igualada), vicepresidente cuarto y uno de los independientes de Junts que integran el Gobierno de la Diputación, ha enfatizado la protección del patrimonio, tanto natural como arquitectónico, que las cuentas de la DIBA permitirán desarrollar el próximo año.

Raül García (Junts) durante un Pleno de la Diputación de Barcelona (DIBA).

Raül García (Junts) durante un Pleno de la Diputación de Barcelona (DIBA). / Jordi Otix

Por lo que respecta a los grupos de la oposición, el portavoz de Junts en la Diputación, Raül García, ha valorado positivamente distintos aspectos de los presupuestos del Gobierno cuatripartito. Por ejemplo, García se ha referido al incremento de apoyo a los Consells Comarcals, a las ayudas a la prevención de incendios y a la ayuda a los municipios en un momento de "tormenta perfecta" en la infrafinanciación crónica de los entes locales, agravada por el aumento generalizado de precios.

El portavoz del PP y alcalde de Castelldefels, Manu Reyes, ha manifestado que, aunque "nos son las cuentas que hubiera elaborado el PP", entienden que hay un fin mayor tras los presupuestos y una voluntad de ayudar a los consistorios. Así, ha añadido que, pese a apoyar las cuentas, fiscalizarán "que se ejecuten correctamente". "No es un cheque en blanco, no son nuestras cuentas, ni compartimos todas las partidas, pero sí la voluntad de encontrar soluciones".

Por último, el único representante de Vox, Jordi Albert de la Fuente, ha dicho que, aunque los presupuestos son "generosos", hay partidas que obedecen a la "Agenda 2030", lo que, en su opinión, supone que "nos condicionamos a agendas ajenas a los motivos por los que los vecinos nos han votado". Esta razón y que "no han contado con este grupo", de la Fuente ha explicado su negativa a respaldar las cuentas.

En primera línea, a la izquierda, Jordi Albert de la Fuente (Vox). A la derecha, Manu Reyes (PP).

En primera línea, a la izquierda, Jordi Albert de la Fuente (Vox). A la derecha, Manu Reyes (PP). / Jordi Otix

Incertidumbre para los próximos años

El presupuesto, el primero del nuevo mandato político 2024-2027, supone un incremento del 14,38% con relación a la previsión presupuestaria del pasado 2023, cuando la DIBA consignó unos 1.087,43 millones. A aquella cuantía, sin embargo, se le sumó un remanente de unos 154,4 millones, una operación que, pese a vislumbrarse una culminación del ejercicio 2024 de igual modo en positivo, no se ha replicado en esta ocasión habida cuenta del contexto de gran incertidumbre en el que se enmarca la proyección de gastos e ingresos para el 2024.

Esta incertidumbre no únicamente viene derivada del contexto global, donde los conflictos bélicos y la inflación han hecho estragos en las previsiones de gastos de las administraciones -los consistorios del Arc Metropolità, sin ir más lejos, cifran en 83,7 millones el gasto extra en 2022 por exactamente los mismos servicios que prestaron en 2021-, sino que también dimana del contexto nacional.

Por ejemplo, la incerteza se predica de lo concerniente a la denominada 'regla del gasto', suspendida durante la pandemia y cuyo marco fiscal es todavía un interrogante, pero entrará en vigor a lo largo del 2024, así como de lo relativo a la todavía incierta participación de la DIBA en los tributos del Estado, partida de capital importancia, pues supone ni más ni menos que el 79% de los ingresos de la corporación (982,19 millones), que no dispone de ingresos tributarios propios.

El 'SOS' por la infrafinanciación

Estos mismos argumentos han sido puestos de relieve por importantes ayuntamientos de la provincia de Barcelona en un 'SOS' por su infrafinanciación, y a ellos se ha referido también la Autoridad Independiente de Responsabilidad Fiscal (AIReF), que en un reciente informe de octubre alertaba a las administraciones públicas de los riesgos de elaborar el Presupuesto 2024 "sin conocer los objetivos que deben cumplir" y basando su previsión en un "incremento extraordinario de los recursos" vinculado a la liquidación del año 2022.

Desde la DIBA inciden en la prudencia de su hipótesis presupuestaria frente la incertidumbre y, por ejemplo, han contemplado por el momento una participación del 3% en los tributos del Estado.

Las citadas incógnitas presupuestarias no hallarán respuesta definitiva hasta la aprobación de los nuevos Presupuestos Generales del Estado. En cualquier caso, la DIBA prevé aprobar en febrero del 2024 el nuevo Plan de Actuación Municipal (PAM) donde cristalicen las partidas presupuestarias que ahora prosperan.