Arte barcelonés

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La Pomona de Sarrià

La Pomona de Sarrià / Ajuntament de Barcelona

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El distrito barcelonés de Sarrià-Sant Gervasi guarda entre sus calles una joya escultórica que no solo es un tributo al arte catalán, sino que también simboliza la belleza y la creatividad de una época. Se trata de la famosa escultura "Pomona", creada por el escultor catalán Josep Clarà.

Josep Clarà (Olot, 1878 - Barcelona, 1958) fue un destacado escultor noucentista catalán que vivió en París y se inspiró en las enseñanzas de Auguste Rodin. Su carrera artística se distinguió por la maestría en la representación de la figura humana y su habilidad para transmitir emociones a través del mármol y el bronce.

En 1938, Clarà esculpió en bronce la Pomona, una figura de una mujer completamente desnuda sosteniendo una manzana en la mano. Esta escultura, que captura la esencia de la diosa romana de la fruta y la flora, no solo atrajo la atención de la crítica, sino que también se hizo con el premio de la Bienal Hispanoamericana de Arte, consolidando así la fama del escultor.

Tras la muerte de Josep Clarà, su hermana Carme inauguró el Museo Clarà en Barcelona, donde la Pomona se convirtió en una pieza central de la colección. Sin embargo, en 1995, el museo cerró sus puertas, y las obras de Clarà se distribuyeron en diversos espacios públicos y museos. Fue entonces cuando la escultura de la Pomona aterrizó en Sarrià-Sant Gervasi.

En 1997, Pomona encontró su hogar frente a la sede del Distrito, custodiando la puerta principal de la antigua Casa de la Vila. Esta ubicación estratégica la ha convertido en un icono de la plaza del Consell de la Vila, y a lo largo de los años, "Pomona" se ha convertido en un símbolo representativo de Sarrià-Sant Gervasi.

Una tradición notable en el distrito es la entrega anual de pequeñas réplicas de la Pomona a las personas centenarias de la zona como un reconocimiento a su longevidad y como un gesto de aprecio por su contribución a la comunidad.

Réplicas de la Pomona de Sarrià

Réplicas de la Pomona de Sarrià / Ajuntament de Barcelona

Pero la Pomona no es la única huella que Josep Clarà dejó en el distrito. Su antiguo taller, casa y museo se han transformado en la Biblioteca Clarà, ubicada en el barrio de las Tres Torres. Este espacio cultural cuenta con un jardín que alberga esculturas adicionales de Clarà, convirtiéndolo en un pequeño museo al aire libre que celebra la obra del escultor y su influencia en la comunidad.

La Pomona, con su belleza atemporal y su conexión con la historia del arte catalán, sigue inspirando a quienes la contemplan y destaca el legado perdurable de Josep Clarà en la cultura y el corazón de Sarrià-Sant Gervasi.