Prolongación de la L8

El pozo para la tuneladora de FGC desembarca en la Gran Via

Primeras afectaciones al tráfico para preparar la unión de las líneas ferroviarias Llobregat-Anoia y Vallès

Imagen de archivo de la estación de FGC Plaça Espanya

Imagen de archivo de la estación de FGC Plaça Espanya / Ricard Cugat

El Periódico

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La esperada prolongación de la L8 de Ferrocarrils de la Generalitat de Catalunya (FGC), que permitirá unir las líneas de Llobregat-Anoia y Vallès, llega a pie de calle. El pozo de entrada de la tuneladora ocupará el lateral mar de la Gran Via entre las calles Llançà y Vilamarí, a pocos metros de la plaza Espanya. Desde aquí se abrirá paso bajo tierra creando un túnel nuevo que llegue hasta las futuras estaciones de Hospital Clínic y Gràcia.

Los trabajos se inician este lunes con la construcción del colector que ejercerá de pozo, y comportan diversas afectaciones de movilidad. Según ha detallado el distrito del Eixample, la obra tiene dos fases y la primera que ahora empieza durará dos meses, hasta el 31 de noviembre. Requiere cortar el acceso de vehículos desde la Gran Via hasta el lateral -lado Llobregat- antes de la calle de Llançà, así como los cruces de esta pequeña calle con la Gran Via.

Un tramo de una manzana de la calle Llançà, entre la Gran Via y la calle de Sepúlveda, quedará sin salida. Solo permanecerán habilitados el carril bici y un carril provisional de doble sentido para el paso exclusivo de vecinos y vehículos de emergencia. Además, los contenedores se trasladarán y se suprimirá un tramo de aparcamiento para motos, pero se mantendrá el acceso al aparcamiento de la sede de la ONCE. En cuanto al transporte público, se trasladará la parada 1559 de Gran Via -donde paran los buses H16, 13 y 91- a la esquina anterior de Gran Via con plaza Espanya, situada frente a la comisaría de Mossos d'Esquadra.

400 millones en total

La unión de las dos ramas de FGC tiene un presupuesto estimado de unos 400 millones de euros y promete ser un impulso notable para la movilidad interna de Barcelona. Y es que este empalme de 4 quilómetros permitirá conectar también los ferrocarriles con la L5 en Hospital Clínic y con las líneas urbanas de FGC (L6 Sarrià, L7 Av Tibidabo y L12 Reina Elisenda) a través de la ampliación de la parada Gràcia con una segunda terminal en la Travessera de Gràcia entre Balmes y Via Augusta. Además el proyecto prevé una parada en Francesc Macià, que es origen y final del Trambaix, línea de tranvía que a su vez tiene en perspectiva enlazarse con el Trambesòs por la Diagonal. En definitiva, la tuneladora tiene como misión mucho más que abrir un túnel.