Plan contra el ruido

Gràcia recortará horarios de terrazas en varias plazas pero ganará mesas

El Ayuntamiento de Barcelona compensa las restricciones dotando de más veladores a las del Sol, la Vila, Diamant y Revolució durante el periodo afectado

Terrazas en la plaza de la Virreina, en Gràcia, por la noche.

Terrazas en la plaza de la Virreina, en Gràcia, por la noche. / Jordi Cotrina

Patricia Castán

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La ofensiva abierta por el Ayuntamiento de Barcelona para frenar la contaminación acústica en las calles y plazas consideradas Zona Acústicamente Tensionada en Horario Nocturno (ZATHN) avanza sin pausa por los distritos más afectados. Este martes se han anunciado las medidas de reducción horaria de terrazas en plazas de Gràcia y en los Jardins de la Mediterrània de Sants, aunque en en algunas de las primeras se ha optado por una novedosa compensación (dotarlas de más veladores) que hasta ahora no se había dado ni en Enric Granados (Eixample) ni en los puntos calientes de Ciutat Vella donde la semana pasada se dieron a conocer los recortes, con gran enfado del sector de la restauración.

En Gràcia, el ámbito de actuación contempla las plazas de Sol, Vila de Gràcia, Virreina, Diamant, Revolució, Joanic y Raspall. En las cinco primeras, las medidas están encabezadas por el adelanto en una hora del cierre de las terrazas de estos espacios (no en los locales), una vez superados todos los trámites administrativos. Es decir, se estima que a principios de septiembre. El concejal de Emergencia Climática y Transición Energética, Eloi Badia, ha explicado que la iniciativa busca reducir el impacto sonoro que afecta durante las noches a los residentes de estas zonas.

Según ha detallado, en cada plaza se ha "trabajado" con operadores y vecinos tras constatar que los sonómetros instalados mostraban que se superaban de manera continua en tres decibelios los límites permitidos en la franja nocturna. Como resultado, el consistorio ha decidido que el cierre de los veladores entre abril y octubre se avance a las 23.00 horas entre semana, y los viernes, sábado y vigilia festivos a las 24.00 horas. El resto del año, se avanzará a las 24.00 los fines de semana y vigilias de fiesta, pero no el resto.

Menos perjuicios

En un intento de paliar el perjuicio económico que suponen las restricciones para la actividad de los bares y restaurantes, se permitirá añadir veladores desde las 20.00 horas hasta el cierre, siempre que haya reducción horaria. En las plazas del Sol, de la Vila y del Diamante se podrán sumar dos mesas por establecimiento. Badia ha apuntado que se ha estudiado caso por caso, de modo que nunca se supere el 15% de la ocupación del espacio público. De hecho, en estos casos será del 8 al 12% de ocupación en dicha franja.

En la de la Revolució, solo se añadirá una por local pero en todo el horario de apertura, los días con recortes. Se espera, de este modo, "garantizar el espacio público de día para usos familiares y vecinales". En este sentido, se ha anunciado la renovación de la zona de juegos infantiles de la plaza en el verano de 2023. Sin embargo, en el caso de la del Raspall se ha decidido "de momento" no consolidar la terraza extraordinaria covid, a causa de algunas molestias detectadas. En la Virreina, por su intensivo uso, no habrá más mesas.

El plan también propone, tanto en estas plazas como en la Joanic, colocar tapones de plástico a mesas y sillas y cadenas plastificadas para atenuar los ruidos, pedir a los establecimientos que tiren el vidrio a los contenedores de día y que los elementos de las terrazas se apilen en el espacio público. En paralelo, se limitarán el número de conciertos y actos nocturnos, se potenciarán actividades familiares diurnas y continuará la campaña de sensibilización a los usuarios, con mediadores ambientales hasta las dos de la madrugada los días de más afluencia.

Badia ha enfatizado que la Guardia Urbana también refuerza su presencia en las plazas más concurridas, con inspecciones y controles hasta las seis de la mañana, en algunos casos permanentes. Sin perder de vista a los establecimientos que puedan alimentar el botellón, el distrito estudia el ámbito donde se implantaría en breve una reducción horaria, como la anunciada en Sant Martí.

Cierre adelantado en los Jardins de la Mediterrània

En Sants-Montjuïc, el ayuntamiento ha decidido que recortará los horarios tanto de terrazas (serán como en las plazas conflictivas de Gràcia) como los de los establecimientos situados en la plaza de los Jardins de la Mediterrània. Estos últimos tendrán que cerrar a la 1.30 horas de la madrugada entre semana y a las 2.00 los viernes, sábados y vigilias de festivos. También aquí habrá dispositivos conjuntos de limpieza y Guardia Urbana en la hora de bajar la persiana, así como el resto de medidas prácticas para minimizar los ruidos.

El distrito cuenta con precedentes, como el caso de la calle de Blai, en Poble Sec, por lo que cree que las amenazas del Gremi de Restauració, que la semana pasada anunció una batalla judicial contra las medidas, no prosperarán. Así lo ha expresado Badia, quien ha recordado que los afectados tienen un mes de plazo para presentar alegaciones, y que mientras tanto se seguirán realizando mediciones sonométricas.