DERECHO A LA VIVIENDA

6 de abril: nueva fecha para el macrodesahucio junto a la Rambla

Tras los cuatro meses de tregua ganados por Resistim al Gòtic para forzar una negociación que no ha llegado a ningún lado, la propiedad reactiva el desalojo de las más de 30 personas vulnerables que viven en Canuda, 37.

Rueda de prensa en Casa África, en riesgo de un nuevo deshaucio. Imagen del interior de Casa África, con algunos de sus ocupantes reunidos tras la rueda de prensa. AUTOR: JORDI OTIX

Rueda de prensa en Casa África, en riesgo de un nuevo deshaucio. Imagen del interior de Casa África, con algunos de sus ocupantes reunidos tras la rueda de prensa. AUTOR: JORDI OTIX / JORDI OTIX

Helena López

Helena López

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Algunos de ellos se instalaron en el edificio en noviembre del 2019, tras encadenar dos desalojos en circunstancias distintas. El primero, el 2 de julio de ese año, ejecutado por los Mossos en un edificio de la calle de Marià Aguiló, en el Poblenou, donde nació Casa Àfrica, proyecto de ayuda mutua entre las personas llegadas de ese continente sin dinero ni red. Solo dos semanas después tuvieron que dejar el edificio en el que habían empezado de cero, en la calle de Ciutat de Granada, en el mismo barrio, tras un incendio. Sobre el tercer edificio en el que establecieron su (precario) hogar y su necesario proyecto, en el 37 de la calle de Canuda, junto a la plaza Vila de Madrid, pesaba una orden de desahucio para el pasado mes de octubre, que lograron aplazar cuatro meses gracias al apoyo de Resistim al Gòtic, plataforma vecinal que arropa y asesora a los habitantes del edificio, muchos de ellos personas en situación administrativa irregular, lo que les hace todavía más vulnerables. El plazo expiró el 28 de febrero sin acuerdo y acaban de recibir una nueva orden de desahucio para el 6 de abril, la semana que viene.

La rueda de prensa es a primera hora de la mañana porque muchos de ellos son 'riders' y más tarde tienen que coger sus mochilas amarillas o turquesa y sus bicis y marcharse a trabajar. Cambiaron la manta por el reparto porque no querían tener problemas con la policía. El motivo de la convocatoria es explicar ese no acuerdo y denunciar que, si nada cambia, la semana que viene serán desahuciadas sin alternativa más de 30 personas vulnerables a dos pasos de la Rambla, pese a una moratoria estatal que no se cansan de denunciar que es "absolutamente insuficiente" porque excluye casos de personas extremadamente vulnerable, como estas.

casa africa

Rueda de prensa frente al edificio, este martes. / Jordi Otix

La finca, propiedad de la Fundación CETT llevaba tiempo vacía, desde que el centro universitario adscrito a la UB trasladara sus oficinas, cuando fue ocupada. Según han explicado este martes algunos de sus habitantes, en el primer piso del edificio viven dos familias con menores y, en los pisos superiores, las personas que conforman el proyecto Casa Àfrica.  

"Ni un milímetro"

Desde Resistim al Gòtic denuncian que el ayuntamiento -quien se comprometió a ser uno de los interlocutores en la mediación- "no se han puesto a trabajar hasta los últimos 15 días"- y que la propiedad "se ha negado rotundamente a hablar con los habitantes de la finca y se ha mantenido, sin ceder ni un milímetro, en la opción de desahuciar sin alternativa". La propiedad ha declinado ofrecer su versión sobre los hechos "por ahora".

Algunos de los integrantes de Casa Àfrica, este martes.

Algunos de los integrantes de Casa Àfrica, este martes. / JORDI OTIX

Interpretación restrictiva

moratoria antidesahucios -ampliada ahora hasta el 30 de septiembre-Es imposible aportar toda la documentación requerida en casos de personas no regularizadasuna interpretación especialmente restrictiva de la norma

Fuentes municipales, por su parte, aseguran que llevan hablando con la propiedad desde noviembre del año pasado. "Tenemos una propiedad, que es un centro universitario, que no ha ofrecido ninguna alternativa y ha dejado en manos del ayuntamiento la situación de los ocupantes, trasladándole la responsabilidad. Desde el distrito lamentamos la prisa en la venta del edificio y la no atención a las necesidades sociales", prosigue la misma voz.

Igual que los movimientos sociales, desde el distrito instan de nuevo a la propiedad a parar el desahucio y sentarse a encontrar una solución "que no pase por el desahucio".

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