Jornada de desahucios parados en Barcelona

Finalmente el trabajo constante del vecindario organizado y la mediación municipal han evitado que se ejecuten los tres desahucios previstos para este viernes en la calle del Portal Nou, en el Casc Antic, y el de la calle de Espalter, en el Raval. De hecho, los ingentes esfuerzos previos de los sindicatos de vivienda de Ciutat Vella y de la Unidad Antidesahucios logró frenar los 14 lanzamientos que en un primer momento estaban agendados para este viernes, 17 de diciembre, pese a una moratoria estatal que en ocasiones activistas, abogados y administraciones tienen que reivindicar en los juzgados hasta el último minuto. "En ocasiones, al final la acaban aplicando, pero tras mucho insistir", apuntan desde los movimientos por el derecho a la vivienda.

Para el Sindicat d'Habitatge del Casc Antic los desahucios parados este viernes estaban cargados de simbolismo porque evidenciaban de forma muy gráfica el proceso de gentrificación en el que el barrio lleva años sumido y contra el que luchan.

Los desahucios aplazados -estas siempre son victorias efímeras- en Ciutat Vella no han sido la única noticia esperanzadora recibida este viernes por el movimiento en defensa de la vivienda de la capital catalana. "Gracias al recurso presentado, la ONU ha solicitado la paralización del desahucio previsto para este lunes en el 209 en la calle de Roger de Flor y hoy mismo hemos hecho llegar esta resolución al juez", anunciaban desde la Plataforma de Afectados por la Hipoteca (PAH). Pese a que la última palabra la tiene el magistrado y el desahucio hoy por hoy sigue en pie, el gesto de la ONU supone un penúltimo cartucho muy bien recibido. No es la primera vez en Barcelona que estas solicitudes por parte de las Naciones Unidas logran parar desahucios que se antojaban imparables. En marzo de este año una familia de Sant Andreu con dos menores logró evitar que los expulsaran de su piso por haberse terminado el contrato de alquiler gracias a esta intervención.

Los últimos del año

El movimiento por la vivienda había hecho este jueves una gran convocatoria para detener el desahucio de Carlos y su madre, de 72 años, el que anunciaban como "el último desahucio del año" en Barcelona, antes de que las comitivas judiciales se fueran de vacaciones de Navidad. Un caso con un significado especial por la fecha, a cuatro días de la Navidad y la misma, hace dos años, en la que se ejecutó con un gran despliegue policial el desahucio de Livia y Juan y sus tres hijos, caso emblemático para el Sindicat de Llogateres porque representaban la lucha contra las subidas abusivas de los alquileres.

La cruz de la jornada se ha vivido en el barrio de Sant Roc, en Badalona, donde la mañana de este viernes una familia con dos hijas menores que tenía una orden de desahucio para el próximo 11 de enero ha sido desalojada sin esperarlo (y sin margen a organizar la resistencia vecinal). "Me han llamado que ya estaban en la calle y con una puerta de seguridad instalada en su casas, ahora estamos llamando a Divarian, propietario del piso, para ver qué ha pasado", explica Carles Sagués, activista de la plataforma Sant Roc Som Badalona, grupo de vivienda que tiene otro desahucio, también de una familia con hijos, también para este lunes, 20 de diciembre.