El Gremi d'Hotels reclama reconvertir pisos turísticos en plazas hoteleras o en edificios completos

¿Son preferibles para una ciudad las plazas hoteleras que los pisos turísticos en bloques de vecinos? El Gremi d'Hotels de Barcelona, siempre muy crítico con la actividad de las viviendas de uso turístico, ha anunciado hoy jueves que pedirá al ayuntamiento que las plazas de alojamiento en pisos se reconviertan en plazas hoteleras o en edificios completos de apartamentos para turistas. En la próxima negociación de las modificaciones previstas en el plan especial urbanístico de alojamiento turístico (PEUAT) incluirá esta demanda, ya que la patronal considera que supone "el gran problema" sectorial en la capital catalana.

Más allá de su ofensiva contra los pisos ilegales, el gremio ha enfatizado hoy que los 9.606 pisos con licencia turística tampoco encajan cuando están en fincas con usos residenciales. Jordi Mestre, presidente de la patronal, ha opinado que "es un tipo de turismo que crea problemas de convivencia con los vecinos y destaca por su incivismo y poco consumo", la mayoría de las veces.

De cara a la revisión del PEUAT quieren "asegurar infraestructuras de calidad", para lo cual proponene que ya que el crecimiento hotelero está muy limitado (imposible en muchas zonas), se compense en forma de plazas hoteleras o edificios enteros dedicados al turismo todo lo que hasta ahora eran viviendas con uso turístico. Incluso traspasando estas licencias a edificios actualmente en desuso.

En este marco, también reivindicarán -como han hecho desde la aprobación del plan, hace tres años- que este se modifique para permitir las reformas integrales y actualizaciones en la planta hotelera barcelonesa.

Tasa polémica

El otro frente que aborda el gremio es el incremento de la tasa turística previsto para este mismo año, que también ha criticado la patronal de viviendas turísticas Apartur. Al aumento que planea (a menor escala) el Govern, hay que sumar los hasta cuatro euros suplementarios por persona y noche que quiere ingresar el gobierno de Ada Colau para Barcelona. Manel Casals, director de la patronal, indica que en el caso de los hoteles de 3 o 4 estrellas representaría una subida de hasta el 650%, que consideran "abusivo y desmesurado".

Mestre también ha apuntado que incrementos de este tipo no contribuyen a fortalecer la competitividad de Barcelona dentro de la península respecto a ciudades tan al alza como Madrid o Málaga. Los hoteleros reclaman que en lugar de castigar a los operadores del alojamiento se "amplíe la base" recaudadora. Es decir, que haya un impuesto en otros servicios vinculados, como el transporte, comercio o restauración.

2020 con posible "frenazo"

El presidente del colectivo también ha reconocido que el nuevo gobierno municipal (con la entrada de los socialistas como socios de Ada Colau) ha comportado un cambio de actitud respecto al turismo, con mensajes más positivos. No obstante, el colectivo piensa que el 2020 podría ser un año de "frenazo" turístico a causa de factores externos como el Brexit o la evolución que pueda tener el coronavirus.

El Gremi ha insistido hoy en que apenas hay anulaciones de reservas por esta crisis sanitaria hasta la fecha. Por contra, Mestre ha enfatizado que la inestabilidad política vinculada al 'procés' ha comportado más cancelaciones que el coronavirus. Aseguran que este factor más los mensajes negativos sobre el turismo desde el 2015 han tenido como consecuencia la disminución de reuniones de empresa y turismo de negocios en la ciudad. Estas reuniones cayeron en el 2018 un 19% respecto al año anterior.