Valls dispara contra Cs por "pactar con reaccionarios" y reafirma su aval a Colau

Manuel Valls ataca a Ciudadanos por optar por el "cuanto peor, mejor" y por pactar con Vox

Manuel Valls ataca a Ciudadanos por optar por el "cuanto peor, mejor" y por pactar con Vox. / periodico

Júlia Regué

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El edil de Barcelona pel Canvi, Manuel Valls, ha disparado este miércoles contra Ciudadanos (Cs) tras la consumación de su ruptura y se ha reafirmado en todas y cada una de las decisiones que tomó desde que forjó su tortuosa alianza con Albert Rivera. "Cs se ha convertido en el partido que ahora pacta con una formación iliberal, reaccionaria y antieuropea", ha atizado, "no se vale esconderse detrás del PP". "Cada uno es responsable de sus actos y considero que es una deriva grave que no comparten muchos de sus militantes y electores", ha lanzado el exprimer ministro francés, sin esconder esta vez cuáles fueron los encontronazos que terminaron con su relación.

En una sala de prensa abarrotada de periodistas, Valls ha asegurado que la separación ha sido fruto de un "problema político grave" y no "personal", con un partido con el que ha compartido "esfuerzos, ilusiones y también desengaños". Ha repasado su trayectoria junto a los naranjas y les ha acusado de agitar el conflicto y de haber "sacrificado Catalunya por ventajas electorales en el resto de España". "Ahora sí puedo explicar que en algunos momentos fue mi compromiso con Barcelona lo único que frenó la ruptura después de las elecciones andaluzas", ha explicado, y ha vuelto a insistir en que la fotografía de la triple derecha en la plaza de Colón "fue un error" y por eso no se postró a ella. "Como hombre de izquierdas y progresista no vine para acabar dirigiendo la lucha para liderar las derechas, relevar al PP, o impedir un gobierno con mayoría constitucionalista en este país", ha rematado.

El ahora concejal ha advertido a Cs de que "la estrategia del 'cuanto peor, mejor' es equivocada y está llena de peligros" y les ha alertado de que han "dejado huérfanas" a las personas que apostaron por ellos el 21-D. "No. Cuanto peor, peor", ha aleccionado. 

Sobre su futuro, ha afirmado que trabajará desde el Ayuntamiento de Barcelona para reconstruir una "estrategia constitucionalista" y ha dejado la puerta abierta a apoyar al nuevo partido de talante catalanista moderado que están forjando personalidades de su entorno, como explicó este diario: "No soy un nacionalista catalán. Tengo una visión de lo que es Europa, de los Estados-Nación. Pero bueno, esperemos, acabamos de salir de elecciones. Ya veremos como las cosas se plantarán", ha valorado, aunque ha dicho que su compromiso con el consistorio es "absoluto" y "prioritario" y que no entrará en la construcción de los cimientos de este futuro partido político. Eso sí, ha desdeñado postularse con el PSOE o Cs y dar el salto a la política nacional como habían apuntado otros medios. 

"No votar a Colau era votar a Maragall"

El exprimer ministro francés ha defendido su apuesta por facilitar la investidura de Ada Colau como alcaldesa de Barcelona y ha cargado contra los tres ediles de Cs que votaron en blanco desoyendo su directriz: "Decidieron no ejercer su derecho a manifestar su rechazo a la alcaldía independentista y optaron por acatar las decisiones de su partido, eludiendo su propia responsabilidad política. No votar a Colau era votar a Maragall", ha espetado.

A su juicio, esta discrepancia era "administrable" dentro del grupo municipal y no tenía por que zanjarse con una división en el consistorio. No se ha olvidado del portazo de Celestino Corbacho, que se sumó este martes a las filas naranjas como independiente. Una maniobra que tachado de "incomprensible". "Cada uno es responsable y coherente, o no", ha matizado.

"Yo no recibo lecciones de oposición a los populismos ni al nacionalismo ni en Francia, ni aquí. Soy coherente y lo demostré una vez más el sábado recordando que no hay presos políticos ni exiliados en el pleno", se ha excusado. "Seamos serios. ¿Es la señora Colau la misma cosa que el señor Maragall? No son la misma cosa, ni ella, ni las bases de BComú, ni sus electores. Ignorar eso es absurdo o mentir", ha proseguido, ignorando que declaró ante el Foro Primera Plan@ organizado por EL PERIÓDICO que "Colau y Maragall son dos caras de la misma moneda". Eso sí, ha reprobado a la alcaldesa por haber colgado de nuevo el lazo amarillo en la fachada del consistorio barcelonés y le ha exigido que lo retire.

"Colau ha tenido que probar una medicina que no le es ajena. La de los escraches. Lo que vivimos el sábado es intolerable y confirma el acierto de mi decisión. Vimos en la plaza de Sant Jaume, otra vez, lo que es el odio organizado del separatismo", ha añadido, sobre la manifestación soberanista que abucheó a algunos concejales.

"No nos va a dar lecciones"

La portavoz nacional de Cs, Inés Arrimadas, ha replicado desde Navarra que Valls "no va a dar lecciones de defensa del constitucionalismo a nadie". "Y menos cuando nos hemos partido la cara en Catalunya, hemos sufrido, amenazas de muerte, agresiones y persecuciones", ha añadido. También con un tono contundente, ha asegurado que no puede aleccionar aquel que ha hecho alcaldesa "a una de las personas más sectarias y populistas" y ha recordado que su grupo tiene más concejales que el del exprimer ministro francés.