EL ESPACIO PÚBLICO EN CIUTAT VELLA

Restauradores y oposición se unen contra Colau por las terrazas de Ciutat Vella

PDECat, PSC, C's y PP acuerdan crear una comisión para marcar de cerca las reducciones de mesas dictadas por el distrito de Ciutat Vella

Terraza de la plaza Bonsuccès a la que se reclama que suprima dos mesas.

Terraza de la plaza Bonsuccès a la que se reclama que suprima dos mesas. / ELISENDA PONS

Luis Benavides

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Continúa  el enfrentamiento entre el Ayuntamiento de Barcelona y el Gremi de Restauració a vueltas con las terrazas. La revisión el pasado verano de la ordenanza aprobada por el anterior equipo de Gobierno de Trias debía permitir recuperar algunos centenares de plazas con una interpretación más flexible. Nada más lejos de la realidad, según el sector, que critica que la tregua generalizada no haya llegado a Ciutat Vella. Tras denunciar la beligerancia e incluso exceso de celo por parte del distrito de Ciutat Vella, que alega que en este distrito la ocupación del espacio público provoca más molestias vecinales que en el resto de la ciudad, y realizar algunos actos de protesta cargados de simbolismo, como la bajada de persianas durante unas horas en la Barceloneta, el Gremi de Restauració ha conseguido la complicidad de la mayor parte de la oposición en sus reclamaciones.

Los grupos municipales Cs, PDECat, PSC y PP han anunciado esta mañana la creación de una comisión especial de seguimiento de la que consideran una “oleada de supresiones de terrazas” en el distrito de la concejal Gala Pin. “En Ciutat Vella se ha reproducido una crisis sin precedentes. Solo en tres meses, 100 de las 400 terrazas del distrito ya han recibido algún tipo de amenaza. Y en 75 de estas terrazas ya ha significado una reducción, en la mayoría de los casos de más del 50%, del número de mesas. En algunos casos también se han producido eliminaciones completa”, ha explicado el director del Gremi de Restauració, Roger Pallarols, acompañado por representantes de los diferentes grupos en la oposición.

Alegaciones y recursos sin respuesta

El Gremi de Restauració critica la falta de diálogo por parte del distrito, algo que “empeora un conflicto”. “Han recibido decenas de alegaciones y se han presentado numerosos recursos, pero el distrito responde con su silencio”, critica Pallarols, quien considera que el Gobierno de Colau está “traicionando el espíritu de un pacto que costó mucho conseguir” al aplicar incorrectamente la ordenanza.

La creación de la nueva comisión, que entrará en el registro en breve, está garantizada con el apoyo de cuatro grupos de la oposición que suman mayoría absoluta, mientras que ERC ha optado por una posición más contemporizadora. El objetivo de esta comisión será “poner la lupa” en la gestión del Gobierno de Colau en esta materia. “Detectamos una gran obsesión por las terrazas, incluso en puntos como donde los establecimientos están muy lejos de ocupar el umbral del 50% fijado por la ordenanza”, continúa Pallarols, quien pone como ejemplo el caso de la supresión de una terraza en la plaza de Ramon Berenguer que solo ocupaba el 2% de la vía pública.

El presidente del gremio en Barcelona, Pere Chias, tras recordar sus implicaciones en la economía local, pone el acento en la vertiente más humana del conflicto. “Las 10 terrazas retiradas la semana pasada se ha traducido en 18 personas sin trabajo”, explica Chias, quien habló “como representante del gremio pero también como restaurador”.

Cumplir la normativa

Desde el ayuntamiento, la lectura de los últimos acontecimientos es muy diferente: "Si tienen más mesas de las permitidas, simplemente las retiramos. Si no tienen licencia, también", explican fuentes del consistorio, quienes confían en que lo que pide el Gremi de Restauració no sea que dejen de aplicar la regulación actual ni que den cobertura a ilegalidades.  

Fuentes del gobierno de Colau recuerdan que el distrito de Ciutat Vella es un territorio muy denso y que su objetivo es garantizar que todos los usos tengan cabida en el espacio público de una manera equilibrada.  Niegan que se esté llevando a cabo una persecución a la actividad de las terrazas, como sostiene el Gremi de Restauració. "Siempre hemos garantizado que se aplique la normativa y que esta aplicación no se haga de manera arbitraria y es lo que seguiremos haciendo", subrayan. 

En el caso de las terrazas revisadas desde junio, el consistorio asegura que el distrito de Ciutat Vella cuenta con 15 licencias de veladores más que antes del citado mes -pasando de 137 a 152- y con dos mesas más - de 1.250 a 1.252- . "Con los datos en la mano no se constata ninguna persecución a la actividad de los veladores", insisten fuentes municipales.

El espacio público es de todos. Bajo esta premisa, el consistorio recuerda que todos los que cumplen los requisitos tienen derecho a pedir licencia de velador. "Cada espacio puede alojar un número de mesas determinado. Si en aquel espacio algún establecimiento más pide licencia para tener terraza, las mesas que caben en ese espacio se tienen que repartir entre más establecimientos y, por tanto, puede suponer que los establecimientos que ya contaban con licencia haya perdido alguna mesa en favor del que la pide de nuevo", subrayan.

Cuatro formaciones, en bloque

Las explicaciones del equipo de Colau no son suficientes para el sector y cuatro de las formaciones de la oposición, que han respaldado la creación de esta comisión de seguimiento. Koldo Blanco, concejal de Ciudadanos, lamenta la situación que atraviesan los restauradores de distrito histórico de la ciudad y la califica de “auténtica persecución”. “En Ciutat Vella, uno de cada cuatro terrazas han recibido notificaciones; sin ninguna motivación, con reducciones arbitrarias”, ha añadido.  Blanco ha destacado la situación de las terrazas del paseo de Joan de Borbó, “consolidadas y aceptadas por los vecinos”. 

El grupo socialista en el consistorio ha sido todavía más duro: “No nos extraña el incumplimiento  (del acuerdo) y tenemos claro el valor de su palabra”, ha dicho el concejal Daniel Mòdol de la alcaldesa de Barcelona, Ada Colau. Según el representante del PSC, el actual gobierno “se ha obsesionado con las terrazas” pero no ha hecho nada para combatir otros problemas relacionados con el espacio público como “la limpieza, la seguridad, los manteros…”, ha enumerado Mòdol, quien ha pedido una reunión urgente con la alcaldesa para hacer una primera valoración del pacto de las terrazas.  Por su parte, Raimon Blasi, del PDECat, ha lamentado "la falta de liderazgo" por parte de Colau, a la que ha pedido más diálogo y pedagogía a la hora de aplicar la ordenanza.

En la misma línea, el representante del Partido Popular, Xavier Mulleras, ha criticado que se persigan a los establecimientos “que cumplen con todas sus obligaciones” mientras permiten la proliferación de otras actividades ilegales como la venta ambulante. “El acuerdo aprobado en junio no era un objetivo en si mismo, sino una herramienta. Tenía que servir para poner fin al conflicto. Colau solo aprovechó el pacto para hacerse la foto con los restauradores”, ha añadido.