ACTUACIÓN POLICIAL EN BARCELONA
Los Mossos desalojan a las últimas 4 familias de dos bloques del Besòs
Los vecinos habían denunciado el incivismo de los rumanos que habían ocupado las 41 viviendas propiedad de la Generalitat
Las últimas cuatro familias que seguían ocupando los bloques de viviendas sociales de los números 244 y 246 de la calle de Cristóbal de Moura del barrio del Besòs de Barcelona han sido desalojadas a primera hora de este jueves sin que se hayan producido incidentes. Un dispositivo de los Mossos d'Esquadra y la Guardia Urbana ha acompañado a la comitiva judicial que ha procedido al desalojo. Solo se ha encontrado con alguna resistencia inicial al abrir la puerta.
Estos dos bloques, propiedad de la Generalitat, estaban ocupados desde enero del 2011, y las 41 viviendas han tenido personas en su interior en algún momento, si bien este jueves la mayoría se habían marchado porque sabían que el desalojo era inminente. Muchos ocupantes eran rumanos y habían protagonizado algunos incidentes y problemas de convivencia. Además se han llevado parte de los equipamientos del bloque, según han asegurado los vecinos.
Estas 41 viviendas nunca llegaron a otorgarse. Ahora deberán rehabilitarse porque han sufrido desperfectos y en algunos casos incluso pillaje, según ha informado el Institut Català del Sòl (Incasol). Los pisos quedarán por el momento tapiados y con vigilancia hasta ser reparados y adjudicados. El tercer bloque de la manzana, en el número 248, está cedido al Patronato Municipal de la Vivienda y ya había sido desalojado semanas atrás.
Petición de ayuda
Uno de los desocupados, Vicente Jiménez, ha dicho a Europa Press que llevaban dos años en la casa, que la tenían bien cuidada y que entraron porque estaba abierta y no tenían adonde ir, por lo que ahora se sienten desamparados.
El hombre, con dos hijos y su mujer embarazada de ocho meses, ha añadido que solo viven del Pirmi de 600 euros que recibe ella. Ha sido atendido por los servicios de emergencias sociales del ayuntamiento desplazados al lugar, y ha pedido ayuda para tener un alquiler social. "No somos salvajes, queremos una vivienda digna", declaró.
Los bloques pertenecen a una promoción de alquiler social que, por la ocupación realizada por estas familias en enero del 2011, no se llegó a adjudicar. El Incasol interpuso una demanda judicial en julio del 2011 por delito de usurpación. El desalojo estaba pendiente despúes de que el juez dictara sentencia.
Fuentes de los Mossos han señalado que en uno de los edificios se ocuparon 18 viviendas y en el otro, 23. Algunas de las personas que los han habitado tienen antecedentes policiales y en los últimos años han protagonizado además incidentes incívicos, que los vecinos denunciaron en EL PERIÓDICO el pasado abril.
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