DOMINGO, 21 H.

Xavi ve ahora "un Barça diferente" para recibir al Athletic

"Es evidente que hemos mejorado, pero también es una evidencia que aún tenemos que mejorar más", considera el técnico

Xavi se quita la mascarilla antes de empezar la rueda de prensa.

Xavi se quita la mascarilla antes de empezar la rueda de prensa. / Alejandro García / Efe

Joan Domènech

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Ni tres victorias seguidas ha sido capaz de encadenar el Barça en la Liga. Ni tres victorias seguidas tampoco mezclando las competiciones. Es el dato que confirma la marcha a trompicones del equipo, que no ha podido coger en ningún momento una velocidad de crucero que le situara donde debería. Lentamente lo va consiguiendo. Los resultados recientes invitan a pensar que se está produciendo un aceleramiento.

Se presenta el Athletic en el Camp Nou, que es el último equipo que batió a los azulgranas. Fue el 20 de enero, en San Mamés, en el duelo único de Copa, resuelto en la prórroga para el cuadro vasco (3-2). Se han plantado en la semifinal del torneo los rojiblancos, que la disputan el miércoles ante el Valencia, en Mestalla.

Alegría de un grupo de jugadores en el último entrenamiento.

Alegría de un grupo de jugadores en el último entrenamiento. / Alejandro García / Efe

Seis partidos sin perder

Xavi admite que este Barça "es diferente" del que cayó hace poco más de un mes en Bilbao. No pierde desde entonces (cuatro victorias y dos empates), con lo que algo más seguro es el equipo. O se siente más seguro. "Es evidente que hemos mejorado, pero también es una evidencia que aún tenemos que mejorar más", afirmó el técnico.

Se ha mejorado la parcela ofensiva, explicó Xavi, con los movimientos con y sin balón, el ritmo de juego y la llegada a posiciones de remate de los interiores. Hay más seguridad y más confianza en el pase y posesiones más largas, abundó. Y, en cambio, en el debe, falta mucha evolución en la fase defensiva: pérdidas de concentración, la protección del área en las acciones de estrategia, la coordinación para mantener la línea defensiva, "alguna pérdida de balón que nos debería dar vergüenza"... Aspectos que no convierten al Barça en un equipo sólido y fiable.

Alves y Memphis serán dos de las novedades de la lista ante el Athletic junto con Lenglet.

Alves y Memphis serán dos de las novedades de la lista ante el Athletic junto con Lenglet. / Alejandro García / Efe

Solo dos veces a cero

Empieza a serlo, sin embargo. Los resultados lo corroboran: el Barça marca más goles (dos partidos seguidos con cuatro tantos a favor, y en tres de los últimos cinco), pero sigue sin cerrar la portería a cal y canto: solo ha permanecido imbatido en dos de los 11 partidos desde el reinicio de la competición en enero: en Mallorca y en Vitoria, con sendas victorias por 0-1. Mantener la portería a cero es el objetivo a corto plazo. 

"No podemos decir que estamos a un nivel altísimo; en algunos momentos sí, pero en otros no", admite Xavi, que no cambia su discurso. Sostiene que no descarta ningún título, pero aboga por conservar "toda la humildad y toda la calma" después de las grandes victorias de las grandes victorias de Valencia (1-4) y Nápoles (2-4). Prefiere la postura de la prudencia y que sea Joan Laporta, el presidente, "un líder natural", quien manifieste la alegría por los triunfos del equipo, como se vio tras el encuentro europeo saltando y cantando con otros directivos.

Lenglet, en un rondo.

Lenglet, en un rondo. / FCB

Alves, Memphis y Lenglet vuelven

Además de la tercera victoria seguida que busca el Barça está pendiente la primera sobre el Athletic esta temporada. Antes de la derrota copera hubo el empate liguero. Será un Barça muy diferente, reconocía Xavi, porque, entre otras cosas, tiene a Adama y Aubameyang, que no habían llegado. Luuk de Jong estaba sancionado y Memphis Depay había recaído. Será una de las novedades de la lista, igual que Clément Lenglet. Más la de Dani Alves, que ha cumplido su sanción.

Sí tenía Xavi a Ferran Torres –"una maravilla futbolista, es de un nivel top mundial", dijo– y tenía Frenkie de Jong, que además de ser "autocrítico y muy exigente consigo mismo", según detectó el entrenador, ahora es "determinante y trascendente", como se esperaba.