Catalunya suma aulas de P-3 por primera vez en seis años

El cambio en las reglas del juego, en concreto la modificación de los criterios de la pasada preinscripción, en la que la Conselleria d’Ensenyament no dictó cierres de aulas de antemano, sino que esperó a que las familias hicieran su elección, ha permitido que las escuelas catalanas aumenten este curso 2017-2018 el número de clases de P-3, en lugar de tener que cerrarlas por el descenso de la natalidad. Es la primera vez en los últimos seis años (cuando empezaron los recortes) en que, lejos de perder, la escuela catalana suma aulas en el primer curso del segundo ciclo de educación infantil.

Así, el próximo 12 de septiembre abrirán en Catalunya 3.144 aulas de P-3 (exactamente, 2.191 en la pública y 953 en la concertada), un 2,5% más que el año pasado, en que hubo 2.139 clases en centros públicos y 928 en concertados. Ha sido clave, destacó ayer el secretario general de la Conselleria d’Ensenyament, Lluís Baulenas, "la reducción de la ratio a 22 alumnos por aula que se empezó a aplicar el curso pasado en los colegios de alta complejidad que lo pidieron y que este año se ha consolidado".

Mientras, maestros y profesores regresaron este viernes a las aulas, que contarán este curso con la incorporación de 5.514 profesionales adicionales, un 7% más que en el curso anterior, destacó la 'consellera' Clara Ponsatí, que señaló que también en este aspecto, el de puestos de trabajo, "Catalunya se aproxima a niveles de gasto similares a los del 2010". Este 2017-2018 habrá  71.175 docentes para atender a 1.562.780 alumnos matriculados, 2.700 más que el curso anterior.

La 'consellera' Ponsatí afirma que el nivel de gasto este curso se aproxima ya al del 2010

De los más de 5.500 nuevos profesores, 800 se destinarán a cubrir sustituciones que, según se comprometió la 'conselleria' con los sindicatos, empezarán a cubrirse a partir del 1 de septiembre. "Las bajas laborales de duración superior a los siete días se cubrirán desde el primero", aseguró asimismo Ponsatí. El resto de docentes adicionales se dedicarán a cubrir las plazas creadas por el incremento de alumnos, a la escuela inclusiva, a los centros de alta complejidad socioeconómica y a cubrir la reducción de una hora lectiva que se ha pactado también con las organizaciones sindicales.

Currículos y entrevistas

La titular de Ensenyament confirmó, además, que el próximo 2018 habrá oposiciones para cubrir 2.000 plazas docentes, aún por determinar. La convocatoria de este concurso público se conocerá, anunció Baulenas, "antes de finales de este año". La Generalitat modificará algunos criterios de ponderación en estas pruebas de acceso a la función pública, "para que la práctica profesional y la experiencia docente tengan algo más de peso respecto a lo memorístico, que es lo que domina actualmente", agregó, por su parte, el director general de Professorat, Ignasi Garcia Plata.

Los directores de colegios podrán escoger a parte de sus maestros a partir de entrevistas personales

Dentro del despliegue del polémico decreto de provisión de plantillas (polémico porque los sindicatos mayoritarios lo rechazan de plano), la Generalitat ha habilitado este curso a los directores de centros educativos para que sean ellos quienes anuncien públicamente las plazas de especialistas que tienen vacantes, a través de la web de Ensenyament, y que, a partir de los currículos recibidos, sean también los propios directores quienes fichen a sus profesores, tras realizar entrevistas personales a los candidatos.

Este sistema se aplicará en casos de plazas perfiladas, es decir de profesores que cubren plazas muy concretas (un especialistas de Matemáticas en inglés, por ejemplo) y siempre de acuerdo con el proyecto educativo del centro. El contrato será, en todo caso, provisional, matizó la conselleria.