NAUFRAGIO EN EL ÍNDICO

La expedición de familiares no halla a los dos españoles desaparecidos en Indonesia

El equipo de rescate no ha hallado rastros de que hubieran estado en la isla de Sangean

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Familiares de los dos españoles desaparecidos en el naufragio de Indonesia, acompañados de representantes de la Embajada española y algunos habitantes de la zona, han rastreado la isla de Sangean sin encontrar ningún indicio de que estén ni hayan estado los dos náufragos.

La familia de Víctor García Montes y Jorge de MiguelVíctor García MontesJorge de Miguel han señalado que tras haber conseguido desembarcar y explorar la isla de Sangean (Mar de Flores, Indonesia), no se ha encontrado rastro alguno de ambos "ni evidencia de que hubieran podido estar en esa localización". Tampoco se han encontrado rastros de todos aquellos enseres que los supervivientes que llegaron a las costas de la isla habían dejado.

Recuerdan los familiares que desde el principio, "y en base a la necesidad de rápida actuación requerida, se había decidido concentrar la búsqueda en esta isla porque se consideraba la única posibilidad para encontrarlos con vida". Según el comunicado, las autoridades indonesias se encuentran de camino hacia la isla para reunirse con los hermanos y decidir los pasos a seguir tras evaluar los resultados de la expedición.

Las dos familias "quedarán eternamente agradecidas a las asistencias recibidas por las autoridades competentes, medios de comunicación y a los innumerables gestos de amigos y personas que, sin conocernos, han contribuido a darnos ánimo y ayuda en estos tan tristes momentos para ambas familias", subrayan los allegados de los dos desaparecidos.

Los dos españoles viajaban en un barco que zarpó el 14 de agosto de la isla de Lombok hacia la de Komodo, dos populares destinos turísticos del país, pero se hundió la madrugada del 16 cerca de Sumbawa.

La embarcación de madera carecía de radio o sistema de GPS, por lo que no pudo emitir una alerta, y los náufragos se agarraron a una parte del barco que se quedó a flote y al bote salvavidas con capacidad para sólo cuatro personas.

En el barco que naufragó también viajaban dos españoles, Rafael Martínez, periodista de la Agencia Efe, y su novia, María Pallol, que lograron sobrevivir y que anoche llegaron a Madrid.