La Defensora se suma al aluvión de críticas a la Guardia Civil

La Defensora del Pueblo se ha sumado al alud de críticas  a la actuación de la Guardia Civil la noche de la tragedia del Tarajal. Soledad Becerril afirmó ayer que, pese a estar previsto en el procedimiento autorizado, el lanzamiento de balas de goma no fue «prudente» debido a «las circunstancias» en las que se encontraban los inmigrantes. Intentaban entrar en Ceuta a nado y 15 de ellos perecieron ahogados.

Becerril, que se prodiga poco a la hora de criticar al Gobierno, midió al milímetro sus palabras para que quedara claro que la actuación no vulneró «la legalidad» al tiempo que la condenaba con rotundidad. Descartó, eso sí, abrir cualquier tipo de expediente al estar el caso bajo investigación judicial. Y tampoco se pronunció sobre el propósito del Ministerio del Interior de reformar la ley de extranjería para legalizar las devoluciones en caliente pese a que la institución que ahora dirige lleva pronunciándose contra las mismas desde el año 2006.

También se distanció de las duras palabras pronunciadas por la comisaria de Interior  de la UE, Cecilia Malmström, que la víspera había amenazado con tomar medidas contra el Gobierno español si se demostraba que había vulnerado la legislación comunitaria. «No son mis palabras. Le recomiendo que visite nuestras fronteras para que vea cuáles son las condiciones en las que se trabaja», señaló.

INFORME DE 50 OENEGÉS / Malmström recibirá en los próximos días un informe elaborado por medio centenar de entidades en el que se denuncia que «los sucesos de Ceuta y las devoluciones en caliente violan la normativa española, europea e internacional». El dosier, que también ha sido enviado al Consejo de Europa, documenta ampliamente la intervención de la Guardia Civil y su «posible responsabilidad en la violación de derechos fundamentales de las personas migrantes».

La defensora efectuó sus declaraciones tras la entrega al presidente del Congreso, Jesús Posada, de su informe anual correspondiente al 2013. El documento contiene un avance de las conclusiones de las 50 inspecciones que la institución ha llevado a cabo en los Centros de Internamiento de Extranjeros (CIE) y en los Centros de Estancia Temporal de Inmigrantes (CETI) y que se publicarán en un informe sobre la prevención de la tortura.

Becerril adelantó que propondrá una serie de «mejoras» para los CIE, con una serie de exigencias para que cumplan con «las condiciones humanitarias necesarias». El informe también constata que algunas de las mejoras que se habían sugerido no han sido atendidas al no haberse aprobado aún el reglamento que el  Ministerio del Interior se comprometió tramitar casi al principio de la legislatura.

De los CETI, la defensora criticó su sobreocupación, lo que, a su juicio, impide atender a los inmigrantes como se debería «pese a los buenos oficios de los funcionarios».