Ciutadans apuesta por demoler la herencia del 'procés'

Cuando un partido empieza su programa electoral planteando “acabar con el monotema del ‘procés’”, queda claro que sus propuestas requieren más de una bola de demolición que de un bisturí o de esparadrapo. Empezando por una “auditoría integral de gasto público” para detectar y fulminar cualquier partida destinada a la causa independentista, Ciutadans aboga por “abrir una nueva etapa de convivencia, estabilidad económica y democracia” donde el soberanismo quede completamente apeado de las instituciones.

La candidatura de Inés Arrimadas defiende la necesidad de volver a participar “en todos los órganos de cooperación del Estado y con las comunidades autónomas”, en referencia a la conferencia de presidentes y a las negociaciones sobre la reforma de la financiación autonómica que desdeñó el Govern de Carles Puigdemont. Asimismo, se compromete a suprimir todas las ‘estructures d’Estat’, eliminando “todos los chiringuitos políticos destinados a promover el independentismo” y “suprimiendo todas las duplicidades y estructuras administrativas innecesarias”.

'Operación derribo'

En esa ‘operación derribo’ Ciutadans incluye el cierre del Consell de Diplomàcia Pública de Catalunya (Diplocat), dedicado en los últimos años a promover la imagen de Catalunya en el exterior, y también del Consell de l’Audiovisual de Catalunya (CAC) porque en su opinión no garantiza la pluralidad en los medios de comunicación públicos “y se ha convertido en una herramienta más del separatismo”. Sobre la tele y la radio autonómicas, precisamente, el partido naranja deja entrever un buen recorte al sostener que “TV-3 es la televisión autonómica con más presupuesto” y que se debe “garantizar una gestión eficaz” acorde con “las necesidades reales de los catalanes”.

"Despolitizar" los medios públicos, acabar con la "publicidad institucional repartida a dedo para financiar medios afines a la causa independentista" (según sus cálculos, 30 millones de euros en el 2017), revisar el funcionamiento de la Agència Tributària de Catalunya y "despolitizar" también los mandos directivos de los Mossos, de quienes siembra dudas sin mencionar el 1-O al sostener que se garantizará "que sean una policía leal a las instituciones y al servicio de todos los catalanes", son otras de las enmiendas a la totalidad. A las que se suma, cómo no, una de las razones de existir del partido naranja: finiquitar el sistema lingüístico actual en las escuelas e implementar un modelo trilingüe de castellano, catalán e inglés.

En el capítulo de construcción, Ciutadans plantea entre otras medidas las de impulsar una reforma constitucional que mejore los encajes territoriales, implementar un plan de choque para el retorno de las empresas que dejaron Catalunya "por culpa del separatismo" y lanzar un plan de incentivos fiscales, financieros y administrativos para "restablecer la seguridad jurídica y la confianza en la economía catalana".