La JEC indaga si 4 ayuntamientos buscan influir en el voto el 27-S

La Junta Electoral Central (JEC) ordenó este miércoles que se compruebe si al menos cuatro ayuntamientos han intentado influir en el voto del 27-S a través de cartas enviadas a los vecinos. La JEC adoptó la resolución, que insta a las juntas provinciales a abrir «expedientes sancionadores» si se confirma el envío de misivas de contenido electoralista, a raíz de una denuncia del PSC. Los alcaldes que firmaron los escritos, todos ellos convergentes, son los de Llagostera, Riba-roja d'Ebre, Subirats y Torelló.

Los socialistas denunciaron que en las cartas, con membrete municipal, piden a los vecinos de sus localidades «no solo que acudan a votar el próximo dia 27 de septiembre, sino que emitan este voto en un determinado sentido». Y reclamaban requerir a los ayuntamientos que se abstengan de hacer este tipo de campañas, iniciar un procedimiento sancionador en aplicación de la ley electoral y depurar «las posibles responsabilidades penales».

La carta plantea que el 27-S todos podrán mostrar libremente su opinión y opción politica en beneficio del bien colectivo del país, pero apunta que estas «no son unas elecciones como otras». «Son una cita electoral que ha de servir para cambiar el futuro, que nos ha de permitir gestionar nuestros propios recursos para evolucionar, para crecer, para ser más competitivos, para atender como se debe las necesidades más básicas de la población», prosigue el texto. Y añade que es necesario un poder local fuerte «a semblanza de los que tienen otros estados del mundo con muchos beneficios para los vecinos y vecinas».

Por eso, pide a los ciudadanos que no dejen escapar «esta oportunidad para cambiar las cosas», ya que el pueblo de Catalunya puede «decidir qué futuro quiere, libremente». «Votemos y dad voz a la democracia, decidamos juntos qué queremos», concluye. Esta última frase no aparece en la carta del Ayuntamiento de Subirats, en la que al final puede leerse: «Ahora no hay lugar para la indiferencia, la renuncia o el miedo».

La junta electoral de zona de Reus ya instó ayer al Ayuntamiento de Riba-roja d'Ebre a retirar las cartas y a que se «abstenga de realizar cualquier tipo de acto de campaña o de incentivación de voto».

La JEC sostiene que, en ese caso, los consistorios estarían vulnerando el «deber de neutralidad política» en periodo electoral.