El Gobierno quita competencias a pequeños municipios para dárselas a las diputaciones

El Ejecutivo da luz verde a la anunciada reforma de la administración local

JUAN RUIZ SIERRA / Madrid

Por qué confiar en El PeriódicoPor qué confiar en El Periódico Por qué confiar en El Periódico

Tal como anunció el pasado miércoles Mariano Rajoy, el Consejo de Ministros ha dado luz verde a la reforma de la administración local. No hay novedades sobre lo explicado por el presidente del Gobierno en el Congreso: los municipios más pequeños podrán ceder competencias a las diputaciones, tras las elecciones locales del 2015 se suprimirá el 30% de los puestos de concejal (pasarán de 68.286 a 20.400, pero tendrá escaso impacto económico, porque muchos de ellos no cobran), se suprimirán las mancomunidades y se potenciará la figura del interventor municipal, cuyo trabajo de fiscalización de la gestión y contabilidad de los ayuntamientos pasará a depender del Ministerio de Hacienda. La reordenación tiene como objetivo un ahorro cercano a los 3.500 millones de euros.

El titular de Hacienda, Cristóbal Montoro, ha desgranado este viernes los rasgos fundamentales de una iniciativa que la oposición no ve con buenos ojos. Al igual que la vicepresidenta, Soraya Sáenz de Santamaría, el ministro ha dado un tono grave al anuncio, que contrasta con los alegres aplausos con que los diputados del PP recibieron el miércoles los recortes del Ejecutivo. "Las medidas responden a la nueva senda de consolidación del objetivo de déficit público planteado por la Comisión Europea" ha comenzado diciendo el ministro.  

"Lo que se pretende es que nuestras corporaciones locales acomentan las funciones para las que tienen presupuesto y que no hagan aquello que exceda de las competencias de la nueva ley de bases del régimen local. Y que al mismo tiempo eliminen órganos intermedios que no tienen mucho sentido, como es el caso de las mancomunidades. También se eliminan las pedanías. Todo ello bajo el principio de 'una administración, una competencia'. Si los municipios de menos de 20.000 habitantes no cumplen con la calidad en sus servicios, esos servicios públicos pasarán a desarrollarse por las diputaciones que actuarán como entidades gestoras de los ayuntamientos de orden menor", ha señalado el ministro.

SIN CONSENSO

La reforma, hasta el momento, no ha convencido a la oposición. El Gobierno quería pactarla con el PSOE, y así lo acordaron en su última reunión Rajoy y Alfredo Pérez Rubalcaba, pero los socialistas, ante la falta de diálogo y prisas del Ejecutivo, han anunciado que llevarán la medida ante el Tribunal Constitucional (TC) si esta no cambia sustancialmente. El PSOE, que no está de acuerdo con la potenciación de unas diputaciones que pidió suprimir en su programa electoral, considera que la modificación de la administración local vulnera los artículos 140 y 128 de la Carta Magna, que se refieren a la autonomía municipal y a la capacidad de los ayuntamientos para dar respuesta a las necesidades de los ciudadanos. 

La Generalitat también sopesa un recurso de este tipo. "La competencia en la reforma del mundo local es de la Generalitat de Catalunya, y la Generalitat de Catalunya no puede ni quiere renunciar a ejercer esta competencia", explicó el pasado miércoles el  director general de Administración Local de la Generalitat, Joan Cañada.