MAS: «Busquemos otras vías para el autogobierno»

Convergència i Unió da por cerrada una etapa de la relación entre Catalunya y España. El presidente de la federación nacionalista, Artur Mas, afirmó ayer que a partir de ahora habrá que buscar «nuevas vías» de relación para seguir profundizando en el autogobierno. Lo explicó junto a su socio, el líder de Unió, Josep Antoni Duran Lleida. Mas habló del derecho a decidir y del concierto económico como objetivo alcanzable. Duran aseguró que en adelante será clave qué peso político tiene CiU en España para poder reclamar. En definitiva, cada uno a su aire pero ambos de la mano en pos de un objetivo inmediato: gobernar Catalunya.

CiU tiene clara, muy clara, cuál es la vía que a seguir en estos momentos de zozobra. Y esa no es otra que entregar el timón de la nave a la federación nacionalista para «la nueva etapa política» que nace con el fallo sobre el Estatut. Mas pidió al president, José Montilla, que sea «generoso» y convoque elecciones cuanto antes. Y aprovechó para pedir el voto: «La sentencia es otro motivo para votar el cambio en Catalunya».

Mas y el líder de Unió, Josep Antoni Duran Lleida, comparecieron ayer para difundir su diagnóstico. De hecho comparecieron por la mañana y por la tarde. Mas se encargó de marcar el calendario de los días, semanas y meses venideros. De entrada, CiU colaborará con el resto de partidos catalanes en el objetivo de lograr una actuación unitaria. Esa unidad, explicó, debe ser la norma en todo lo que ataña a las protestas por parte de Catalunya por el recorte del Estatut. El pleno extraordinario sobre ese recorte en el Parlament, la manifestación del sábado 10 de julio, que Mas jaleó con entusiasmo: «Nosotros también somos convocantes». Algunos alcaldes de CiU empezaron a llamar a sus ciudadanos a acudir al acto. En todo caso, pleno, manifestación, actos reivindicativos. Aquí acaba el primer capítulo.

Una vez concluido, siempre según el relato de Mas, llegará un punto de inflexión, a partir del cual cada partido debe exponer su plan, cuál su programa. A partir de ahí CiU no quiere compañeros de viaje. Quiere gobernar. Cree que no se puede retrasar la respuesta debida a la sentencia del Constitucional. «Administrar esta respuesta de futuro requerirá un Govern muy fuerte, con un liderazgo muy claro y un proyecto potente».

Mas, que rechazó por poco creíble la apuesta de ERC por una rápida transición a la independencia, se propone como guía de la nueva etapa. Y para ello requiere una victoria amplia en las catalanas y, por lo tanto, elecciones. Él y Duran urgieron ayer la convocatoria electoral. Mas repitió una tesis expuesta el fin de semana: las elecciones serán después del verano, eso no tiene vuelta atrás, pero que sean lo más pronto posible. En septiembre.

Pese a que los nacionalistas acotan su voluntad de mantener la unidad a las próximas semanas, tanto Mas como Duran subrayaron que el hecho de que accedan a sumar sus esfuerzos con los socios del tripartito, aunque sea temporalmente, supone una muestra de generosidad por su parte.

'CASO MILLET' / Ambos abundaron en la idea de que CiU está siendo atacada, en alusión a la comisión de investigación sobre la supuesta financiación irregular de la federación mediante el cobro de comisiones de obras públicas. «Estos días podríamos estar muy molestos y enfadados con el tripartito, pero hemos de sobreponernos a nuestra incomodidad». Sin embargo, es innegable que el fallo del TC dejó en segundo plano las informaciones que apuntan a que el saqueador confeso del Palau, Fèlix Millet, tenía control sobre adjudicaciones de obra pública que correspondían a gobiernos de CiU.