Opinión | EDITORIAL
Política y responsabilidad
Una comparecencia de Puigdemont en el Senado es una buena forma de abrir la puerta a la acción de la política
Para Catalunya, estos días deben ser aquellos en los que por fin la política toma el mando de la crisis de Estado que vivimos. Marcados en rojo en la agenda de finales de semana los plenos en los que el Senado aprobará la aplicación del artículo 155 y el Parlament debatirá sobre estas medidas (con la posibilidad de la declaración de independencia encima de la mesa), el tiempo corre hacia decisiones que, de tomarse, dibujarían un panorama muy incierto y preocupante. La crisis que, por acotarla, empezó con las sesiones del Parlament el 6 y el 7 de septiembre, ya ha causado importantes daños económicos y políticos, y procesos judiciales con enormes repercusiones para los afectados. Si esta semana acaba con la aplicación del 155 duro decidido por el Gobierno y/o la declaración de independencia, el autogobierno de Catalunya tal y como lo conocemos habrá terminado, un hecho que puede tener consecuencias políticas, económicas y de paz social trascendentales.
Es la hora de la política, pues. Por eso cabe aplaudir la idea de que el 'president', Carles Puigdemont, acuda al Senado el 'president', Carles Puigdemont, acuda al Senadopara explicar su postura. La Cámara Alta tiene ante sí la función constitucional de aprobar las medidas que el Gobierno ha diseñado dentro del artículo 155. El PP goza de mayoría absoluta en el Senado y, además, cuenta con el apoyo del PSOE y de Ciudadanos. La aprobación de la intervención está garantizada si no media una negociación. Que Puigdemont acuda al Senado –algo que no sucedió en la última conferencia de presidentes autonómicos– descargaría tensión y abriría la puerta a la acción de la política. Pío García-Escudero, presidente del Senado, debe acomodar lo mejor posible al presidente catalán.
Es imperativo que estos días estén marcados por una frenética actividad política. Demasiado tiempo y demasiadas oportunidades se han desaprovechado en las últimas semanas, meses y años a lomos del inmovilismo y de la unilateralidad. La encuesta publicada el fin de semana por EL PERIÓDICO indica que la mayoría de los catalanes no quieren ni el 155 ni una DUI, y eso es exactamente con lo que podemos encontrarnos a finales de semana. No se trata de solucionar esta gravísima crisis en unos días, pero sí de encauzarla y guardar los botones nucleares. Toca, aunque sea en el descuento, un ejercicio de responsabilidad.
- Hacienda te devuelve 300 euros si tienes un hijo menor de 25 años y 900 si tienes dos: así tienes que ponerlo en la declaración de la renta
- Muere Itxaso Mardones, reportera de Gloria Serra en 'Equipo de investigación', a los 45 años
- Adiós a los cajones de la cocina: la solución con perchas que puedes colocar en cualquier parte
- Pedro Sánchez se plantea renunciar como presidente del Gobierno tras la investigación a su mujer
- El CIS publica una encuesta sobre las elecciones en Catalunya a pocas horas del comienzo de la campaña
- Tiempo de Catalunya, hoy, viernes 26 de abril: empieza un esperanzador episodio de lluvias
- El CEO publica la primera encuesta de la campaña de las elecciones en Catalunya
- Buenas noticias para los jubilados: la paga extra de verano viene con sorpresa