Kiti Mánver: "Una de las cosas más divertidas de esta profesión es poder hacer de todo"

Además de haber hecho mucho cine en su larga carrera, Kiti Mánver ha intervenido en los últimos años en series como 'Gran Hotel', 'Fenómenos', 'Gran Reserva: el origen' y 'Frágiles'. Ahora es Charo, la madre de Juanjo (José Luis García Pérez), en la segunda temporada de la serie 'Vive cantando', que Antena 3 emite los martes por la noche (22.40 horas).

–Su personaje tiene miga, ¿no?

–Sí, la madre de Juanjo es una mujer independiente y un poco egoistona, pero también es una viva la virgen de esas maravillosas que ha hecho lo que le ha dado la gana. Eso trae problemas, pero también mucha diversión para ella.

–Y su Charo oculta historias...

–Bueno. Se había ido cinco años al Caribe y ahora tiene necesidad de volver con su hijo y apañarse con él. Es una peluquera estupenda, pero le hubiera gustado ser una cantante como Trini. Por eso, la relación con Trini es magnífica, de aceite puro entre las dos. Tienen una sintonía absoluta. Es lo del famoso Edipo, que los hijos buscan a la mujer que se parezca a la madre y las mujeres buscamos al padre en los novios. Es un topicazo, pero es así.

–¿Se lo está pasando bien?

–Sí, es un personaje muy divertido de hacer. Ella es muy alocada y muy vital. Es egoísta, pero generosa también. No piensa mucho las cosas que hace. Además, me han hecho cantar nada más empezar. A ella le hubiera gustado ser cantante, pero se ha quedado en peluquera de artistas. Aunque no está frustrada por ello. Le saca jugo a la vida.

–¿Qué tal le han recibido los veteranos de la serie?

–El recibimiento ha sido maravilloso. Había trabajado con Manuel Galiana, porque hice una gira de casi tres años con '¡Ay Carmela!' Manuel es como de mi familia. Con José Luis García Pérez había trabajado en un piloto y en una película, y lo poco que coincidimos nos caímos bien y nos compenetramos en el trabajo. Con Gorka Otxoa hice de su madre en 'Pagafantas', y rodamos un corto hace poco. Y luego me he encontrado con esta maravillosa bestia escénica y televisiva que es María Castro, a quien no conocía, porque los actores no tenemos tiempo de ver la tele.

–¿No la había seguido en la serie 'Sin tetas no hay paraíso'?

–No. He flipado con ella, porque había visto tres capítulos de 'Vive cantando' y me dije: «Esta tía sí que me gusta». Cuando la he conocido en persona, resulta que la voz la tiene mucho más aguda y le pone un trabajazo impresionante. ¡Y cómo se mueve! Es una bestia parda impresionante. Todo lo hace muy sencillo y muy facilito. Es amorosísima.

–¿Le gustó la serie cuando vio esos tres capítulos?

–Sí. Le dije a José Luis cuando coincidimos en esos rodajes que 'Vive cantando' me molaba y que me vendría bien pillar una serie como esta. No es que me ofreciera para el papel. Yo, en general, digo: «Si hay un episódico, llamádme, porque me gusta esta serie». Lo suelto por si acaso cae. Y esta vez ha caído.

–¿Qué comparte con su personaje en la vida real?

–Supongo que vitalidad sí que tengo. Es un personaje un poco más mayor que yo, pero no me importa. He estado haciendo [en el Teatro Lara de Madrid] una obra de teatro que se llama 'Las heridas del viento', en la que hago de hombre. Cuando lo vas a hacer, te mueres de miedo. Te ponen el pelo gris y te echan encima unos cuantos años. Pero todo el mundo me dice que estoy muy mona, y estoy encantada. Me he echado unas poquitas canas más.

–¿Cómo lleva lo de hacer casi siempre de madre?

–Yo llevo haciendo de abuela desde los 19 años. Nunca me ha parecido mal. Todo lo contrario, creo que es una de las partes más divertidas de esta profesión eso de poder hacer de todo. Puedes actuar en papeles secundarios o protagonistas o cameos de media secuencia. El secreto es tomárselo como si fuera grande todo.

–Su papel lo iba a hacer Concha Velasco, pero se puso enferma…

–Estoy segura de que ella saldrá de esta, porque es una fuerza de la naturaleza y una maestra de la interpretación.

–¿Ha hablado con ella?

–No he hablado con ella, porque son cosas muy delicadas y hay que respetar a las personas. Pero estoy al tanto de todo. Coincidí con ella en 'Gran Hotel' y le tengo mucho cariño.

–¿El trabajo de los actores anda tan mal como el del resto de los españoles?

–Sí. Hay un 70% de compañeros que están en paro. Como no cambie la situación, esa cerrazón que tienen con lo del IVA y la ausencia de ayudas nos va a matar. Siempre ha parecido que la única profesión que tiene ayudas es la nuestra, cuando hay una barbaridad de cientos de miles de millones que le estamos dando a los bancos por el morro y nadie dice nada. Parece que la única que esta subvencionada es la cultura. Si no cambian, van a destruir el país, no solo nuestra profesión. En todos los países civilizados la cultura la cuidan y la miman como oro, porque es fundamental. Desgraciadamente, nosotros tenemos una tradición muy terrible de que nuestros gobernantes han sido muy borricos en muchísimas ocasiones y esto nos persigue desde hace tiempo a lo largo de la historia. Y ahora que habíamos avanzado un poquito, de golpe nos damos este hostión.

–¿Son especialmente borricos los gobernantes actuales?

–Ellos y su familia no. Borrico para lo que el pueblo quieren que sea borrico.

–La puntilla ha sido lo del IVA…

–Eso es inhumano. Somos el único país de Europa que tiene esa barbaridad del 21% del IVA en cultura. Grecia y Portugal, que son más pobres, lo tienen muchísimo más bajo. Es evidente que han ido a degüello contra nosotros, porque les estorbamos y no les gustamos. ¿Que si es por ser de izquierdas? Cada uno puede ser lo que le dé la gana. Vivimos en un país libre, donde uno puede opinar y ser lo que quiera.

–¿No tiene la sensación de que les están pasando factura?

–¿Sensación? Es que es una evidencia. Está escrito y superdicho. Lo decimos ya a voces y a gritos, porque nosotros también cotizamos y pagamos hipotecas. Además, somos de las profesiones mas honestas del mundo, porque los sueldos de los actores no se pueden disimular: están ahí. Siempre flipo cuando dicen lo de «en B». Me pregunto qué es eso de «en B». ¿Cómo lo hace la gente? ¿Cómo puede decir la gente que no ha cobrado lo que ha cobrado? En nuestra profesión no se puede.

–¿Les están haciendo pagar el apoyo a Zapatero?

–Yo no he apoyado a Zapatero. Eso no va por esto o por lo otro. El PSOE ha cometido errores gravísimos. Ahora están igual de sinvergüenzas en el sentido de no pensar en la gente. Nadie se ha bajado un puñetero euro de su sueldo, ni de sus prebendas y privilegios. Y a la gente cada vez nos quitan más. Estoy hablando en general de nuestro país. Nosotros somos un reflejo de que hay algo, además, ahora, de otra gente que nos tiene especial manía. Los dos grandes partidos están hechos unos sinvergüenzas. Lo siento mucho. Están en plan inhumano.

–¿Tiene algún proyecto entre manos?

–En esta profesión, junto con los pintores, somos los más longevos. Al ser tan rica, siempre te está dando lecciones. He hecho ya muchas cosas, porque empecé con 16 años y tengo 61. En ese sentido, me parezco a mi personaje: quizá no sea tan loca ni cabeza hueca como Charo, pero para mí la edad es la que uno siente que tiene. Creo que tengo muchas cosas por hacer todavía. Me apunto a muchos cortos, colaboro con gente joven, porque me gusta saber qué huelen, por dónde respiran… Si veo que la cosa se pone muy dura, me pongo a producir, como he hecho con la última obra de teatro, y ya está.

–¿Lo de salir en la tele les ayuda a los actores a que les salgan más trabajos en cine y en teatro?

–Cuando era joven, decían: «El que vale, vale, y el que no, a televisión». Fíjese cómo han cambiado las cosas. Ahora, aunque tú valgas, necesitas pasearte un poco por las audiencias para que se fijen en ti y luego compren una entrada para verte en el teatro. Es necesario.