Del pepino al calabacín

Dicen queCarmen Machiva a volver pronto a la exitosa telecomediaAída (T-5), pero en su larga ausencia señalemos que su hijaLore(Ana Polvorosa) está manteniendo muy alto el pabellón de la astracanada y de la risa. Ahora mismo, esta muchacha acaba de llegar de Italia y está contentísima. Ha comunicado a sus amistades del bar que ha triunfado mucho como artista televisiva. Y les pone un DVD en el que les enseña la calidad de su trabajo interpretativo. Efectivamente, es una labor muy bonita: consiste en hacer de chica anuncio de un artilugio alargador de penes que se llamaElonguipene. Y para darle más convicción al asunto sale primero con un humilde pepino, una cosa pequeñísima que ella mira con tristeza y gran desasosiego. Pero luego, inmediatamente, enarbola un colosal calabacín y su alegría es infinita. O sea, con el didactismo de las hortalizas refuerza enormemente el reclamo del anuncio. Nos alegramos en casa de queLorehaya triunfado en la tele. Hasta ahora lo había intentado todo: desde ser ratoncita en laratomaquia Gran hermano, hasta probar fortuna como cantante de Eurovisión. No tuvo ningún éxito la pobre criatura. Pero con esteElonguipenesu mala suerte ha concluido. Lo más hermoso de este gag es la ausencia de complejos deLore. No se le caen los anillos por anunciar tan prosaico artilugio. ¡Ah! Deberían tomar nota algunas criaturas que trabajan en Tele 5, esas que creen que construyen una poética cada día, y lo único que consiguen es un paisaje de ripios tan zafios como tristes.

ECOS DE 'LA BODA DEL AÑO'.-Al cierre de esta edición no hemos visto todavía, en ninguna cadena, la más mínima referencia a esa boda que ocurrió el sábado en Barcelona y que consiguió -y esta era la noticia- un pintoresco paisaje nunca antes conseguido: la fusión más entusiastica y pictórica de criaturas del PSC y delSálvame deluxe. Ninguna cadena hasta el momento, les decía, menos una: TV-3. Ayer, enEls matins,Helena Garcia Meleroimpulsó un ejercicio de cotilleo muy cumplido, en donde glosaron -a la vista de unas cuantas fotos fijas- la magnitud del acontecimiento. Escuchamos frases como:«¡Ay! Van todos vestidos muy de Madrid»o«Esta va a ser la boda del año en Barcelona, no cabe la menor duda». Y una comprensible excitación les invadía. Lograron un estilo del queCunísiempre intenta huir: entre el¡Hola! y el¡Qué me dices!