INCIDENTE EN SANT VICENÇ DELS HORTS

Unos mossos tienen que coger sus coches particulares para ir en ayuda de unos compañeros

Dos sindicatos policiales denuncian la precariedad en que trabajan los agentes

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Un grupo deocho mossos que acababan de entrar de servicio tuvieron que desplazarseen dos coches particulares a auxiliar a unos compañeros que habían lanzadoun aviso de situación de riesgo el pasado viernes enSant Vicenç dels Horts. Los policías no pudieron ir en vehículos oficiales de mossos ya que en esos momentos en la comisaría no quedaba ninguno de los cuatro coches de los que dispone. La razón es que estos habían sido utilizados por los agentes que estaban pidiendo los refuerzo, según explicaron ayer fuentes oficiales del cuerpo policial.

Los hechos se produjeron el viernes, cuando a las 13.30 horas, se recibió el aviso de una violenta pelea familiar. Dos agentes en un coche patrulla acudieron al lugar y, tras calmar la situación, cuando volvían a su vehículo fueron agredidos por un miembro de la familia. En ese momento, todos los familiares se lanzaron contra los agentes, que pidieron ayuda por la emisora. Otros dos coches logotipados y uno de paisano se dirigieron al lugar.

Sin embargo, en comisaría, los agentes que a las 14.00 horas se incorporaban para el turno de tarde, oyeron esa petición de ayuda y, al ver que no habían coches disponibles, decidieron coger dos vehículos particulares e ir a socorrer a sus compañeros. «Lo hicieron por prurito profesional», dicen fuentes oficiales de los Mossos. Al final, cuatro agentes resultaron heridos, dos de los cuales están de baja.

CAMBIOS DE TURNO /El Sindicat de Mossos d¿Esquadra-CCOO y el Sindicat de Policíes de Catalunya (SPC)pusieron ese incidente como ejemplo de «la mala gestión» del parque móbil de los Mossos, queha perdido 446 coches por los recortes. «No puede ser que unos policías no tengan coches para ir en ayuda de compañeros; algún día ocurrirá una desgracia y no se podrá ir porque no habrá vehículo», ha señaladoToni Castejón, del SME-CCOO. Por su parte, David Miquel, del SPC, ha comentado que lo ocurrido demuestra «la precariedad en que se trabaja». «No puede ser que, ante la falta de coches, los agentes que entran en un turno tengan que esperar a que vuelvan los que están patrullando pues no hay más coches».