LA ACTIVIDAD SÍSMICA EN CATALUNYA

El terremoto del Empordà, uno de los más intensos de los últimos años

Los seísmos más recientes superiores a los 4 grados en la escala de Richter fueron en el 2013, ligados al proyecto 'Castor'

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El terremoto de 4,3 grados en la escala de Richter que ha sacudido el Empordà esta madrugada ha sido uno de los más intensos de los últimos años en Catalunya, una zona de actividad sísmica moderada y donde la mayoría de seísmos son de menores de 3 grados y pasan desapercibidos para la población. El de esta noche, con epicentro en la bahía de Roses, se ha notado, no solo en el Empordà, sino también en el área de Barcelona. Vecinos de Sant Adrià, Gavà, Sabadell, Mataró, Molins de Rei, Esplugues de Llobregat o Viladecans, entre otras zonas, se han despertado sobresaltados por el temblor.

En el ránking de actividad sísmica que elabora el Institut Cartogràfic i Geològic de Catalunya, hay que remontarse al 2013 para encontrar terremotos de más de 4 grados. Casi 400 seísmos de esa intensidad y menores se sucedieron ante la costa de Tarragona, ligados a la actividad del proyecto Castor, que buscaba usar un yacimiento submarino como almacén de gas, para lo cual se estuvieron haciendo prospecciones. El proyecto fue, finalmente, cancelado por el riesgo que suponía para la población. 

RIESGO MODERADO

Catalunya está situada en una zona de colisión entre las placas tectónicas de Europa y África. Sin embargo, la intensidad de los movimientos es moderada y, por tanto, los terremotos, que son fruto de esta actividad, son escasos, de baja potencia y apenas percibidos por la población.

El terremoto más grave ocurrido en Catalunya se produjo el 2 febrero de 1428. Tuvo su epicentro en Queralbs, localidad que quedó destruida, y dejó decenas de muertos. El temblor también causó daños en Barcelona, donde las sacudidas se sintieron con una intensidad equivalente a 6 grados en la escala de Richter. Otros seísmos que causaron daños graves ocurrieron el 19 de septiembre de 1923 en la Vall d'Aran, con una intensidad máxima epicentral de VIII en la escala MSK, que equivale a entre 5,5 y 6 grados en la escala de Richter, y el 12 de marzo de 1927 en Sant Celoni, que fue de intensidad VII, equivalente a entre 5 y 5,5 grados Richter.

En el conjunto de la península Ibérica, cada año se registra  entre 1.200 y 1.400 terremotos, según Protección Civil, que destaca que si bien España no representa "un área de ocurrencia" de grandes seísmos, sí tiene una actividad sísmica "relevante" con sismos de magnitudes inferiores. Son raros los terremotos que ocurren en el centro de España, y son más habituales en la costa mediterránea. Asimismo, los seísmos destructores escasean afortunadamente. Los más comunes son aquellos con magnitudes inferiores --de 2 a 2,9--, y la frecuencia media de estos sismos es de 760 terremotos por año.