Solo una chica entre los 10 primeros de la Olimpiada matemática española

El estudiante madrileño Ismael Morales se ha impuesto en la 12ª Olimpiada matemática española, celebrada el fin de semana en Barcelona, y ha obtenido así la clasificación para la Olimpiada Internacional que se celebrará el próximo julio en Hong Kong. Junto a Morales, que cursa segundo de bachillerato en el instituto Al-Satt de la localidad de Algete, también competirán representando a España los cinco estudiantes clasificados a continuación, todos varones. La primera chica ha sido Berta García, también de Madrid, que ha ocupado la novena posición.

En la Olimpiada española, que se ha celebrado en la facultad de Matemáticas y Estadística de la Universitat Politècnica de Catalunya (UPC), han participado 77 estudiantes menores de 18 años, clasificados en las pruebas preliminares organizadas en sus respectivas comunidades autónomas, de los cuales solo nueve eran mujeres. Tras Morales, que ya había participado en la anterior Olimpiada, el sexteto español en Hong Kong lo compondrán, por orden, Martín Ortiz (País Vasco), Jordi Rodríguez Manso (Barcelona), Alberto Acosta (Castilla-La Mancha), Daniel Puignau (Madrid) y Alberto Augurel (Aragón).

Como explica María Gaspar, presidenta de la comisión organizadora de la Real Sociedad Matemática de España, las seis preguntas del examen tenían un grado de complejidad muy elevado para evitar, lógicamente, que todos los participantes acertasen. Sin embargo, lo que más las caracteriza es la formulación, normalmente problemas largos e ingeniosos cuya resolución puede demorarse hasta una hora.

Berta García y sus compañeras Victoria Arenas (Córdoba) y Lucía Ma Li (Gran Canaria), clasificadas para la próxima Olimpiada femenina de Europa, explican que practicar mucho y conocer los problemas de años anteriores son también claves para el éxito. "No tienen que ver con lo que hacemos en clase", dicen.

María Gaspar considera que el primer motivo que explica la escasa representación femenina es la competitividad y una falta de motivación ante concursos de este tipo. “Ya se presentan muchas menos a las pruebas clasificatorias, por lo que es lógico que luego haya menos en la final. Eso pasa en la mayoría de los países”. Sin embargo, cuando se dedican con pasión, obtienen buenos resultados. Lucía y Victoria, por ejemplo, fueron las primeras en sus respectivas provincias.