El rector de la UB se rebela contra el aumento de tasas

El anuncio del ministro de Educación, José Ignacio Wert, de incrementar en un 66% el importe de las tasas para cursar estudios en la universidad a partir de septiembre ha sacudido a la comunidad universitaria. El rector de la Universitat de Barcelona (UB), Dídac Ramírez, rechazó ayer con contundencia la medida, que, en su opinión, no aportará más ingresos a las universidades ni contribuirá a mejorar su modelo de financiación. Ramírez aseguró, en una declaración institucional, que cualquier estudiante que demuestre méritos podrá acceder a la UB, sea cual sea su situación financiera. «Nadie se quedará fuera por razones sociales y económicas», dijo.

«El aumento de tasas no es una medida de alcance global, no busca incrementar los ingresos de las universidades y su sostenibilidad, sino que solo se plantea como solución puntual para paliar el déficit», lamentó Ramírez. Para el rector, las tasas que pagan actualmente los estudiantes que acceden a la universidad española son equiparables a las de países como Francia y Alemania.

También Daniel Peña, rector de la Universidad Carlos III de Madrid, criticó la subida de tasas, una medida que, a su parecer, atenta contra la igualdad de oportunidades. Y lo propio hizo, aunque con palabras más cautas, la vicepresidenta de la Conferencia de Rectores de las Universidades Españolas (CRUE) y rectora de la Universidad de las Islas Baleares (UIB), Montserrat Casas: «En este momento de crisis, y cuando todos los países de la OCDE apuntan a que más del 60% de los puestos de trabajo van a necesitar una titulación superior, ningún estudiante debe quedarse sin estudiar por motivos económicos», declaró.

EQUIDAD / Otros responsables universitarios, en cambio, no discuten la conveniencia de elevar la aportación de los estudiantes a su formación (que pasará del 15% actual al 25% del precio real de los estudios), pero sí lamentan que esta subida no se aplique «con criterios de equidad», denunció Antoni Giró, rector de la Universitat Politècnica de Catalunya (UPC). «Si aumentan las tasas, sería lógico y razonable que se incrementara también la dotación estatal para becas», dijo Giró, que considera preocupante que el ministro Wert haya optado por anunciar un incremento de este calado «sin consensuarlo con las universidades, de forma precipitada y con argumentos equivocados, como el de que las universidades son poco eficientes».

En esa misma línea se pronunció el secretario de Universitats i Recerca de la Generalitat, Antoni Castellà, que ayer, en el acto de investidura del empresario Salvador Alemany como nuevo presidente del Con-

sell Social de la UB, anunció que el caballo de batalla del Govern las próximas semanas serán, justamente, las becas.

De cómo quede el fondo para estas ayudas, dependerá también el porcentaje de incremento de matrículas que autorice la Generalitat. Un aumento de entre el 10% y el 15% de la aportación a becas se traduciría en unos 30 millones de euros. Y eso, dijo Castellà, significaría que un 30% de los universitarios catalanes podría beneficiarse de una ayuda el curso próximo».