Los sindicatos acusan a Rigau de preparar un tercer tijeretazo

Las conversaciones para organizar el próximo curso escolar alcanzaron ayer un punto de absoluto desencuentro entre la Conselleria d'Ensenyament y los sindicatos del sector, que acusan a la titular del departamento, Irene Rigau, de querer aplicar en Catalunya unos recortes más severos si cabe que los previstos en el decreto del ministro José Ignacio Wert. La Generalitat, según aseguran los representantes de los docentes, pretende ahorrarse un 15% del salario de los maestros sustitutos mediante contratos que solo cubrirán las horas lectivas que impartan. La Administración afirma, por su parte, que la propuesta se encuentra aún en fase de negociación.

«Si la semana pasada Ensenyament ya confirmó que 770 interinos perderán el curso que viene su empleo, como consecuencia del incremento del horario de los profesores de plantilla y del aumento de la ratio de alumnos por aula, ahora nos hemos encontrado con que los sustitutos solo cobrarán un 85% del sueldo», denunció ayer Lluís Filella, de CCOO.

«Con este son ya tres los tijeretazos que aplica Ensenyament este año en la escuela catalana», lamenta Ustec, el otro gran sindicato del sector. «Laconsellera se está pasando de frenada, está yendo incluso más allá de lo que marca el decreto de Wert», insistió Filella, convencido de los negativos efectos que esta medida tendrá sobre los alumnos. «¿Se supone que estos sustitutos no vigilarán, pues, el patio? ¿O no irán a las reuniones del claustro?», preguntó.

Para expresar su descontento, los centros de Barcelona han organizado para esta tarde, a la salida de clase, una pitada de un cuarto de hora de duración. El martes, profesores, padres y alumnos han sido llamados a concentrarse, a partir de las cinco de la tarde, delante de la sede de la consejería en la capital catalana.