ACTIVIDADES EDUCATIVAS CLAVES PARA LA EQUIDAD

Las escuelas recuperan este curso las colonias

Unos monitores de Fundesplai llevan de excursión a un grupo de niños en Vilanova de Sau (Osona).

Unos monitores de Fundesplai llevan de excursión a un grupo de niños en Vilanova de Sau (Osona).

MARÍA JESÚS IBÁÑEZ
BARCELONA

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Las escuelas catalanas han decidido desempolvar las mochilas y volver a calzarse las chirucas. Después de tres años de restricciones económicas, de renunciar a colonias y a excursiones porque el presupuesto del colegio no daba para más y porque a las familias de los alumnos no se les podía cargar con este gasto extra, el nuevo curso empieza con un cambio de tendencia. Las empresas dedicadas al ocio educativo están registrando incrementos de reservas, después de haber perdido hasta un 20% de usuarios desde el 2011. La subida es modesta, pero suficiente como para «poder afirmar que buena parte de los escolares catalanes volverán a tener salidas educativas este año», señala Pep Montes, gerente de la Associació Catalana d'Empreses del Lleure, l'Educació i la Cultura (Acellec).

Los aumentos van del tímido 5% que respecto al año pasado ha registrado la Acellec -la patronal que agrupa a medio centenar de empresas privadas del sector y que no descarta recibir más peticiones de reserva a medida que avance el curso- y el aproximadamente 35% de la Fundació Catalana de l'Esplai (Fundesplai), que el año pasado hizo una intensa campaña en los colegios, explicando los beneficios educativos de las convivencias escolares.

¿Estamos entonces ante un posible brote verde? ¿Es este un indicador de que las familias catalanas están encarando el final de la crisis? «En parte, sí, y en parte, no», responde Montes. «Es cierto que en los últimos años la capacidad adquisitiva de los hogares ha ido cayendo y que ahora hay cierta estabilización», afirma el gerente de la Acellec, pero también es cierto que las empresas del sector han hecho un «esfuerzo por abaratar costes y revisar los precios a la baja», agrega.

ESTANCIAS MÁS CORTAS

Además, las estancias han dejado de ser de tres o de cuatro días, como solían ser antes de la crisis, «y ahora se reducen a una sola pernoctación o, incluso, a salidas de un único día, sin que los niños tengan que pasar la noche fuera». Algunos de los colegios que han optado por recuperar las colonias este año «han decidido que de momento sean cada dos años para que las familias las vean más asumibles», indica Montes.

El hecho de incluir unas jornadas de convivencia dentro del proyecto pedagógico de un centro representa un valor añadido, en un momento en que las escuelas compiten por atraer alumnos. Por eso, subraya el responsable de la Acellec, «cada vez más las casas de colonias ajustan sus actividades al temario del curso de cada colegio, para que los profesores puedan aprovechar la salida como una herramienta didáctica».

Así, después de unos años en que las plantillas de docentes han sido muy ajustadas y faltaban manos para acompañar a los grupos de colonias, los colegios han acabado por valorar el que los chavales ganen en autonomía personal, que aprendan a compartir y a trabajar en equipo y que adquieran valores de respeto al medioambiente, el patrimonio y el territorio, subraya Núria Valls, subdirectora general de Fundesplai.

SISTEMA DE BECAS

Otra de las razones del aumento que este curso están detectando los organizadores de colonias está vinculado a los sistemas de becas que se han desarrollado (y perfeccionado) durante los años de crisis. Por eso, también las entidades de carácter social que se dedican a estas actividades registran cifras optimistas este curso, «propiciadas por las becas que se han creado para evitar que ningún chico se quede sin poder ir de excursión», indica Valls. Las ayudas de esta entidad, que cubren el 20% del coste de las colonias, las gestiona cada colegio, en función de las necesidades de los alumnos o del conjunto de la clase.

«El objetivo es acabar con la típica situación de una clase en la que una veintena de alumnos se iban de colonias y cuatro estudiantes tenían que quedarse en casa por motivos económicos», defiende la directora de Fundesplai. «Hay que tener en cuenta que la participación en actividades de ocio educativo es una de las herramientas mejor valoradas por todos los expertos para garantizar la equidad en la escuela», destaca Marià Pérez, director del área de Escuelas de la Fundación Pere Tarrés.

También la Tarrés ha ideado un sistema propio de becas. Este año, en contra de lo detectado por otras entidades, la fundación no ha experimentado ningún incremento en la demanda de colonias. En su caso, apunta Pérez, el aumento, aunque ligero, ya se produjo durante el pasado curso 2013-2014, cuando se pusieron en marcha por primera vez estas ayudas.