CiU rectifica y apoya la ley antihomofobia

Está de plácemes el movimientoLGBT: la noticia de queCiUha dado marcha atrás yapoyará laproposición de ley contra la homofobia marcará el comienzo deldebate en el Parlament, este miércoles centrado en laenmienda a la totalidad presentada por elPP. Las conversaciones de los últimos dos meses entre convergentes y representantes de las asociaciones degais, lesbianas, bisexuales y transexuales han convencido al partido nacionalista de ponerse del lado de la norma --que hasta hace dos meses no apoyaba--, según el diputadoJordi Turull porque la negociación ha puesto de manifiesto los puntos en común entre el partido y las entidades. "Es más lo que nos une que los que nos separa", dijo el portavoz convergente en el Parlament.

Lograr este entendimiento no ha sido fácil, subrayan las asociaciones. "Hicimos muchísima presión y conseguimos cambiar la voluntad política", dice Joaquim Roqueta, secretario general de la Coordinadora de Lesbianes, Gais, Transsexuals i Bisexuals de Catalunya. "Ha sido una victoria que ha costado muchísimo", añade Eugeni Rodríguez, portavoz del Front d'Alliberament Gai de Catalunya y presidente del Observatori contra l'Homofòbia. El movimiento defendía la necesidad de una ley específica contra la homofobia y CiU contestaba que la norma contra la discriminación que se gestaba en la Conselleria de Benestar Social era un paraguas más que suficiente. "El hecho de haberse opuesto a la ley los hubiera puesto al lado del PP, y supongo que eso electoralmente no se lo podían permitir", dice Roqueta. "CiU ha reaccionado bien y a tiempo y ha sabido ponerse al lado del movimiento", dice Rodríguez.

UN TEXTO EJEMPLAR / "Hemos demostrado capacidad de diálogo", defiende Turull. "Ahora lo que queremos es mejorar la ley y cambiar algunas cosas, y para hacerlo seguiremos dialogando". Las asociaciones se dan por avisadas y dicen que vigilarán que las enmiendas que proponga CiU no mermen el espíritu de la norma. Los convergentes no renuncian a su ley contra la discriminación (llamada a amparar a inmigrantes, discapacitados y otros colectivos considerados vulnerables), pero a partir de ahora tendrán especial cuidado en que no se solape con la otra. En los albores de la larga tramitación de la ley, losLGBThan cosechado su primer triunfo, y ven el comienzo del debate parlamentario como una oportunidad histórica para que Catalunya apruebe una norma que no existe en ninguna parte. "Hay que dar ejemplo al mundo", proclama Rodríguez.

No es menor motivo de alborozo que por fin --subrayadas las dos palabras'-- la ley llegue al Parlament. Por fin. El texto, que establece medidas específicas contra la discriminación y contra los actos -una nueva expresión- "LGTBfóbicos", fue elaborado en la época del tripartito, lo cual habla de la larga espera del colectivo. Después vino la legislatura de convergentes y populares, muy corta, y la convocatoria electoral, el año pasado, cuando las asociaciones entendieron que era el momento de actuar: la búsqueda de apoyos de los partidos en plena campaña fue el primer paso para llegar hasta aquí.