VIAJE DE ESTADO
Felipe VI: "La relación entre México y España no tiene límites"
«El espacio de encuentro y actuación entre México y España no tiene límites». Las palabras de Felipe VI ante el Senado mexicano se plasmaron este martes, dentro de la visita de Estado de tres días de los Reyes, en un apretado programa que, además de la sesión solemne en esa «casa del pueblo mexicano», incluyó la inauguración de un foro empresarial con más de 700 empresas de ambos países y la creación de un certificado de dominio de la lengua española, una comida con personalidades mexicanas y un encuentro con la colectividad española.
En la sesión solemne del Senado, Felipe VI se refirió largamente al «trabajo conjunto de los legisladores de ambos hemisferios» que culminó en Cádiz con la aprobación de la Constitución de 1812, «obra extraordinaria, gran expresión jurídica del liberalismo clásico, puente normativo entre Europa e Hispanoamérica». Al Rey solo le faltó gritar: «¡Viva la Pepa!», como se conoció popularmente aquella Carta Magna.
Asimismo, a la hora de citar los «íntimos vínculos humanos» como principal lazo de unión entre España y México, el Monarca resaltó, como el día anterior, «las migraciones del exilio político y cultural de los años 30 y 40 del pasado siglo», es decir, los exiliados republicanos acogidos por el presidente Lázaro Cárdenas. Y junto a ellos destacó «la fuerte inversión y presencia empresarial española de los últimos 25 años».
FLUJO COMERCIAL
En el foro empresarial, Felipe VI señaló que ambos países iniciaron dos décadas atrás un «proceso de profundización de sus relaciones económicas», en el que «México se ha consolidado como un socio comercial de primer orden para España». El Rey resumió: «El flujo comercial bilateral se acerca a los 9.000 millones de euros y México es el primer destino de nuestras exportaciones a Iberoamérica y el primer suministrador de América Latina; España es para México su primer comprador en la Unión Europea y su segundo inversor, con un monto de más de 50.000 millones de dólares».
El presidente mexicano, Enrique Peña, destacó en su discurso ante ese foro que ha puesto en marcha con éxito nuevos «mecanismos de apertura y competencia» y, sobre todo, «transparencia y combate a la corrupción» para alentar la inversión extranjera.
CAMBIO GENERACIONAL
Distintos diplomáticos, funcionarios y medios de comunicación mexicanos señalaron que el talante que Felipe VI está mostrando en México con su actitud y sus discursos «marca un notable cambio generacional». Un antiguo funcionario dijo incluso al diario 'La Jornada' que el tono del discurso del Rey «por primera vez no parecía dirigido a un subordinado, sino a un igual». En ese mismo sentido, varios diplomáticos recordaron la forma como hablaba el rey Juan Carlos, sobre todo en sus visitas a México durante la presidencia de Carlos Salinas, entre 1988 y 1994. Y a continuación resaltaron la «cordialidad, afecto y marcado matiz de cercanía» mostrados ahora por su heredero.
El propio presidente Peña afirmó que el nuevo Rey «ha sido un referente de renovación y confianza para Europa» porque «su preparación y su visión corresponden a los nuevos desafíos de nuestro tiempo». Y añadió: «Estoy seguro de que con su liderazgo fortalecerá la proyección e influencia positiva de España en el mundo».
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