El 'sí' y el 'no', juntos en la calle sin crispación

MARTA LÓPEZ / GLASGOW

Por qué confiar en El PeriódicoPor qué confiar en El Periódico Por qué confiar en El Periódico

«Quedémonos a salvo en la Unión. Los ingleses son nuestros amigos, los galeses también. Y los norirlandeses». Apostado en una esquina de la calle Buchanan, un señor con traje y corbata y con el cartelito de No Thanks interpela a todos aquellos que pasan con distintivos del signo contrario. Es un intercambio amistoso, simpático, que suele acabar con una sonrisa y un apretón de manos.

Los partidarios del  y del no comparten estos días el espacio público. Los primeros son mucho más visibles porque son más. Más joviales y también más jóvenes. La campaña unionista asoma más tímida porque los vientos soplan en la calle a favor de la independencia y eso hace que «sea mucho más respetable, mucho más popular estar con el sí», sostiene Katrhyrn Crameri, de la Universidad de Glasgow. «Además muchos partidarios de la Unión no se sienten para nada representados con la campaña negativa que ha realizado Better Together, con lo cual optan por no exhibir sus opiniones en público», añade esta analista.

Pero si algo caracteriza esta campaña es la ausencia de crispación social en el debate y en el espacio público. Como ironiza Bob, un veterano activista que pide el voto para el sí, «es en lo único que somos británicos», ya que comparten esa característica flema. «Hay más violencia en el fútbol», recuerda. Y no le falta razón, porque es en el deporte rey donde los escoceses liberan todas sus pasiones, apoyando a cualquier selección que se enfrente a la inglesa y vistiendo la camiseta del contrincante, sea cual sea.

Marcha orangista

En estos últimos día de campaña, los partidarios de mantener la unidad de Gran Bretaña multiplican los actos al margen de la campaña Better Together, que encabeza el exministro de Finanzas laborista Alistair Darling. Ayer, miles de personas marcharon por Edimburgo en un desfile organizado por la radical Orden de Orange en apoyo al no a la independencia.

La marcha transcurrió sin incidentes al son de los tambores y flautas y flanqueada por un amplio dispositivo policial. «Un enemigo que divide y es diabólico se ha alzado contra Escocia disfrazado de falso patriotismo y de nacionalismo en el referendo contra nuestro amado Reino Unido», denunció al final de la marcha el gran capellán de la orden, Inri Williamson, informa Efe.

El de ayer fue el segundo acto unionista organizado al margen de Better Together, después de que el viernes por la noche Nigel Farage, el líder del partido nacionalista británico UKIP, visitó Glasgow entre protestas de un centenar de personas por su política xenófoba de rechazo a los inmigrantes.

En los próximos días, las dos campañas se preparan para una agenda intensa de actos para cortejar al todavía gran número de indecisos que constatan las encuestas y que pueden decantar la balanza.