Los ajustes en el gasto público

Mas responde a las críticas por los recortes bajando sueldos al Govern

Artur Mas, y la presidenta del Parlament, Núria de Gispert -a su derecha-, junto a varios 'consellers'. ayer en la Cámara catalana.

Artur Mas, y la presidenta del Parlament, Núria de Gispert -a su derecha-, junto a varios 'consellers'. ayer en la Cámara catalana.

FIDEL MASREAL
BARCELONA

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«No podemos pedir sacrificios a los médicos y no a los políticos». La frase es de un destacadoconsellery resume el estado de ánimo del Govern de Artur Mas en el epicentro de una crisis que sigue incrementando la tasa de paro y de unos recortes públicos que ayer hicieron que toda la oposición coincidiera en torno a una reclamación: la Generalitat debe mover ficha. El Govern, muy molesto con los médicos del Institut Català de la Salut (ICS), que el martes exigieron que el Ejecutivo se recortase sus sueldos, trató de disipar este clima con un gesto de austeridad interna. Lo anunció el propio Mas en la sesión de control parlamentaria: «Los miembros del Govern y altos cargos este año no tendrán paga extra de Navidad. La eliminaremos entera».

Losconsellersadmitían que se trata de apretarse el cinturón para compensar los ajustes que el Govern reclama a médicos y enfermeras, entidades sociales, profesores y al conjunto de funcionarios. El ahorro que supondrá la medida es de 1,8 millones de euros, y afectará a unos 350 altos cargos. Elpresidentdejará de percibir unos 10.000 euros brutos. Losconsellers, 7.700. Los secretarios generales dejarán de ingresar este diciembre 6.000 euros y los directores generales, 5.700.

HABRÁ MÁS GESTOS / Fuentes del Govern explicaron que, en breve, habrá nuevos gestos de ahorro y sugirieron que otras instituciones públicas podrían tomar ejemplo. Inmediatamente después, la presidenta del Parlament, Núria de Gispert, anunció su intención de proponer también a los diputados restricciones ejemplarizantes y, a las pocas horas, el Ayuntamiento de Barcelona informó de que en su caso se propondrá a los altos cargos que sean ellos quienes renuncien a la extra navideña.

La decisión de sacrificar esta paga estaba sobre la mesa de Mas desde antes de que los médicos del ICS exigieran el martes a los responsables gubernamentales que prediquen con el ejemplo. Pero que elpresidentanunciara precisamente ayer esta decisión refleja una evidente voluntad de contrataque contra los médicos y enfermeras de los ocho hospitales del ICS y sus denuncias respecto a la falsedad de las listas de espera oficiales, la injusticia de los recortes sobre los usuarios de la sanidad, y la intención gubernamental de rebajar sueldos a facultativos y enfermeras. La prueba del enojo contra los médicos es la siguiente frase de un miembro del Govern: «Unconsellercobra menos que un jefe de servicio de un hospital del ICS». Una afirmación que los médicos desmienten. Los facultativos respondieron con indiferencia al anuncio de Mas.

OPORTUNISMO IMITADO / Los grupos de la oposición denunciaron que el gesto no va más allá del oportunismo preelectoral. Pero cuando la semana que viene el Parlament discuta medidas similares, difícilmente ningún partido se negará a los recortes.

Los que pueden estar tranquilos son los trabajadores de Ferrocarrils de la Generalitat, que seguirán recibiendo los lotes de Navidad por un valor total de 140.000 euros. Eso si no prospera la petición de ERC alconsellerLluís Recoder para que anule esta gratificación.

Sueldos aparte, el Parlament reflejó ayer que el Govern vive con incomodidad la presión de la oposición, convencido como está de que su rumbo es el correcto. Elpresident cree que la imagen que los medios de comunicación reflejan de su gestión siempre está presidida por los recortes y no por aquello que funciona. En otras palabras, Mas tiene sed de buenas noticias. Pero ningún grupo de la Cámara catalana le ayudó en este tema. Al contrario.

El PPC, socio presupuestario de Mas, le anunció que no habrá cheques en blanco. Alicia Sánchez-Camacho reclamó el cumplimiento de los planes de formación ocupacional. Pero el candidato de los populares por Barcelona en las próximas elecciones generales, Jorge Fernández Díaz, fue más allá al afirmar que «los catalanes se van a morir viendo películas en catalán». Una manera más que peculiar de criticar que la Generalitat inyecte dinero para traducir películas cuando está recortando la sanidad pública.

LA CULPA, DEL TRIPARTITO / ERC, pese a la nueva etapa de colaboración total con CiU, denunció la escasez de políticas de formación ocupacional y pidió también al Govern que actúe y lidere. ICV-EUiA volvió a reclamar más fiscalidad y menos recortes. Y el PSC logró alterar alconsellerde Benestar, Josep Lluís Cleries, al recordarle que las entidades sociales han tildado de «impresentable» el impago de dos meses a residencias de personas mayores, discapacitadas y enfermos mentales. Cleries recordó que se ha tratado de un problema de tesorería y apuntó a un argumento que el Govern no dejará de usar: «La Generalitat tiene problemas porque el tripartito los ha provocado».