PERFIL

Íñigo de la Serna, de la política municipal a la obra pública

Rajoy escoge a un dialogante y telegénico conocedor del territorio para encauzar las inversiones en Fomento

jcarbo36115787 iigo de la serna161103190710

jcarbo36115787 iigo de la serna161103190710 / periodico

MANUEL VILASERÓ / MADRID

Por qué confiar en El PeriódicoPor qué confiar en El Periódico Por qué confiar en El Periódico

Si había que buscar perfiles dialogantes para el nuevo Gobierno, Íñigo de la Serna Hernáiz se ajusta a los requerimientos del puesto. Al menos así lo demostró desde la presidencia de la Federación Española de Municipios y Provincias (FEMP), puesto que ocupó entre 2012 y 2015. Sus compañeros de partido alaban su capacidad de tender puentes con  los representantes de otros partidos, incluso cuando había que hacer frente a decisiones poco municipalistas del gobierno de Rajoy.

Nacido en Bilbao en 1971, el nuevo ministro de Fomento se licenció como ingeniero de Caminos, Canales y Puertos en la Universidad de Cantabria y en Santander empezó su carrera política como concejal y en ella ha seguido hasta hoy. Con solo 36 años se convirtió en el 2007 en el alcalde más joven de una capital de provincia y cuatro años más tarde revalidó la mayoría absoluta con un récord de votos del 56%. Pese al retroceso del PP, en el 2015 consiguió mantener el puesto, ya sin mayoría absoluta, gracias al apoyo de los dos concejales que obtuvo Ciudadanos en la capital cántabra. Un buen aval para entrar en un Gobierno que dependerá del apoyo del partido de Albert Rivera. 

Su imagen de joven atractivo y telegénico le catapultó a la política nacional, aunque siempre con cargos en organismos de representación municipal. En el 2015 dejó la presidencia de la FEMP y pasó a ocupar la presidencia de la Red Española de Ciudades Inteligentes y la Red de Ciudades Españolas por el Clima y desde el pasado 1 de enero es presidente del Consejo de Municipios y Regiones de Europa. Un organismo de la UE presidido en su día por Pasqual Maragall y Jordi Pujol.

El principal reto que tendrá que afrontar en su departamento es qué hacer con una red de AVE llena de líneas a medio terminar y con unas inversiones cada vez más a la baja, mientras los territorios siguen reclamando que se cumplan los plazos pactados. Empezando por el presidente cántabro, Miguel Ángel Revilla, que poco después de conocer el nombramiento le saludó con elogios y su eterna reivindicación frustrada del ‘AVE de la anchoa’. Bagaje de diálogo y conocimiento de los representantes de los territorios con los que deberá lidiar no le van a faltar.