El Gobierno evita las críticas por el espionaje en Catalunya

A diferencia de lo que hizo el jueves el PP, elGobiernohaevitado este viernes lascríticas por los supuestos casos deespionajea partidos políticos enCatalunya. Tras el Consejo de Ministros, la vicepresidenta SorayaSáenz de Santamaría se ha limitado a explicar que se trata de presuntos comportamientos que de confirmarse son “muy graves” y que la Policía los investigará “hasta el final”.

“Si esas noticias se demuestran, son actuacionesmuy graves que castigarse. No sé si se ha espiado, quién ha espiado o cuánto costaban los informes, pero si se confirma es una conducta muy grave. Puede que allí [en el restaurante donde se grabó el encuentro entre la líder del PPC, Alicia Sánchez Camacho, y la exnovia de Jordi Pujol Ferrusola, María Victoria Álvarez] sea generalizada esta conducta, perono es lo habitual”, ha señalado Sáenz de Santamaría poco después de señalar que es laPolicíaquien está realizando unas investigaciones con las que el Ejecutivo “colabora”.

Respuesta a Homs

Sobre las declaraciones que el conseller de Presidència y portavoz de la Generalitat,Francesc Homs, que este viernes no ha descartado una supuesta relación entre las escuchas y elproceso soberanista que vive Catalunya, la vicepresidenta ha dicho: “Siempre que salen noticias de distinto tipo, veo al portavoz ligarlo con el mismo tema”.

La vicepresidenta, por tanto, ha optado por su perfil más institucional y no ha querido entrar a fondo en un escándalo al que se agarra ahora el PP para intentar desviar la atención del caso de Luis Bárcenas, su extesorero. De hecho, la secretaria general de los conservadores, María Dolores de Cospedal, ha dado instrucciones a su equipo para que intentecolocar el foco en las escuchas.