"Hay margen para hacer la consulta y hacerla bien"

Josep Rull (Terrassa, 1968) concreta más que nunca la posición de CDC sobre la consulta. Consciente del fuerte golpe que representa el caso Pujol para su partido, el flamante coordinador general convergente avanza cambios de fondo para que su partido recupere terreno.

-El Gobierno del PP no ha cambiado su posición sobre la consulta pese a la manifestación de la Diada...

-Ya nos ha advertido de que usará todas las herramientas para impedirla, en un ejercicio de miopía política de gran magnitud. Por ello, nuestra posición tiene un elemento de riesgo, pero lo más sensato es dar un paso adelante hacia la constitución de un nuevo Estado. Lo menos prudente sería quedarnos quietos.

-¿Qué harán tras la previsible suspensión de la consulta por parte del Tribunal Constitucional?

-Nosotros, en todo caso, seguiremos trabajando, tomaremos cautelarmente las medidas para hacer posible el 9-N, porque la suspensión no comporta posicionarse sobre el fondo de la cuestión.

-¿Qué pasa si los siguientes pasos que dan ustedes topan con la negativa de funcionarios o de otros ciudadanos -los llamados a las mesas electorales- a obedecer, porque la consulta está suspendida?

-Estos son los elementos que forman parte de las garantías democráticas necesarias, y hemos de ser capaces entre todos de buscar este marco que tenga la máxima confianza y seguridad. Entraremos en un terreno que hemos de gestionar de la mejor manera, en relación a funcionarios, ciudadanos y ayuntamientos, para constituir las mesas, para que la comisión de seguimiento y de control se puedan desplegar... Estamos convencidos de que hay margen. El mandato es hacerlo y hacerlo bien.

-El Gobierno podría impedir también estos preparativos...

-El bien jurídico supremo a proteger es la democracia. Es más perjudicial no votar el 9-N que hacerlo. Por la voluntad del pueblo de Catalunya y también por el bien de España.

-¿Entonces asistiremos a un choque de legitimidad contra legalidad?

-Exacto. Nos movemos en un terreno en el que la legitimidad democrática puede acabar teniendo mucha más potencia que una visión de legalidad que ignora el principio democrático.

-¿Qué opina de la propuesta explícita del presidente de ERC, Oriol Junqueras, de saltarse la legalidad española, y de la contundente réplica del líder de Unió, Josep Antoni Duran Lleida, acusándole de dañar al proceso, romper la unidad y decir «disparates»?

-Nosotros estamos por cumplir la legalidad catalana. No pedimos que se incumpla una ley española, sino que se cumpla una catalana que hemos sido capaces de elaborar con un amplísimo consenso, y que tiene toda la fuerza de la legitimidad democrática del Parlament. Esta es la visión de síntesis, sólida y expresada en positivo.

-Usted ha planteado la refundación de Convergència en términos como el de la regeneración democrática. ¿En qué se concretará?

-Estamos abiertos a todo. Hemos de conectar de la mejor manera con esta nueva sociedad extraordinariamente exigente. Rendir cuentas a nivel interno es fundamental y le anuncio que se producirá incluso cuando parezca innecesario. Hemos de ampliar la capacidad de decisión de las bases respecto a los cargos. Cuando se hable de personas, a partir de ahora las urnas serán el único instrumento a la hora de ratificarlas en Convergència.

-No lo descartamos, pero esto lo decidirá el congreso del 2015.

-Entonces, ¿habrá una urna para que toda la militancia escoja al secretario general?

-La otra pata de la refundación de Convergència es la definición netamente independentista y por la justicia social. Pero existe una marca que propugna esto: ERC. ¿Por qué ir a la copia si ya existe el original?

-Es que aquí no hay originales. La independencia se amplía en el momento en el que un partido que inicialmente no lo era acaba sumando a mucha gente que ahora considera que esta es la vía adecuada. El objetivo de Convergència Democràtica no es radicalizar a los convencidos, sino ampliar la base.

-En cuanto a la justicia social. ¿En qué percibiremos concretamente esta apuesta?-Quien garantiza la sostenibilidad del Estado del bienestar son las políticas que se han hecho desde CiU. Las políticas sociales más potentes son las que hace CiU en los ayuntamientos, en las diputaciones y en el Govern. Porque para salvar el Estado del bienestar se deben tomar decisiones complicadas e incómodas. Lo hemos logrado. Queremos acortar la distancia entre cómo nos ven y como somos.

-Pero, más allá de la percepción que puedan tener los ciudadanos, hay hechos...

-¿En qué sentido?

-Los recortes en educación, sanidad, el apoyo a la reforma laboral, la gestión de la renta mínima... ¿Todas estas medidas cómo se revierten?

-Recuperando este espacio. Ya no hay nuevos recortes y estamos iniciando un proceso de retorno a los ciudadanos de lo que tuvimos que ajustar, como la devolución de la paga extra a los funcionarios. Queremos consolidar esta etapa. Convenimos que el relato del primer año de Govern nos ha podido llevar a un cierto cliché de partido poco social. Queremos consolidar las políticas de los tres años siguientes de consolidación del Estado del bienestar.

-En su confesión, Jordi Pujol dijo estar dispuesto a dar explicaciones. ¿Cree que los pasos que ha dado posteriormente, intentando torpedear el proceso judicial y dando largas al Parlament, corroboran esta primera promesa?-Ojalá toda la gente requerida por el Parlament por temas complicados como este actuara de forma tan inmediata, dando respuesta y poniéndose a disposición, como ha hecho el president Pujol.

-En una entrevista en TV-3 en el 2009, Pujol dijo acerca de los escándalos de corrupción en los partidos políticos: «No entremos porque todos harían algo de tufo». ¿No deberíamos entrar de una vez?

-Él debe dar explicaciones sobre el comunicado que hizo, que afecta a un caso de naturaleza privada. Hemos de separar las dos cosas. Estamos sometidos al escrutinio permanente y al rendimiento de cuentas permanente.

-CDC está en un proceso judicial por financiación irregular, con la sede como aval... ¿Suprimiría la financiación de empresas a partidos?

-No lo ha decidido el partido, pero yo eliminaría la aportación de empresas a la financiación de los partidos. Creo que se puede avanzar en otras líneas en que la financiación pública tenga un peso más significativo, además de particulares, con un límite económico, o el micromecenazgo (crowdfunding).

-El primogénito de Pujol, que hoy declara ante el juez, está investigado por posible intervención en cobro de comisiones. Ante los casos abiertos por la justicia y los informes policiales conocidos, ¿es posible sostener todavía que en este país no ha habido cobro de comisiones?-Estamos en un Estado de derecho. Los indicios se han de acreditar. Estamos a disposición total de la justicia, queremos que esta sede tenga paredes de cristal. Y también lo quiere el Govern.