La Diputación de Barcelona apoya el 9-N con los votos de CiU, ICV-EUiA y ERC

El pleno ha rechazado una moción del PSC que defiende consultar a la ciudadanía de forma acordada y que matiza que la ley no es la herramienta adecuada

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El pleno de la Diputación de Barcelona ha aprobado este miércoles una moción de apoyo a la consulta del 9 de noviembre con los votos favorables de los grupos que la han propuesto, que son CiU, ERC y el de ICV-EUiA, mientras que PSC y PP han votado en contra.

La moción aprobada con los votos favorables de CiU (19), ICV-EUiA (4) y ERC (2), y los contrarios de PSC (17) y PP (6) muestra "el apoyo a la convocatoria de la consulta del 9 de noviembre para decidir libremente el futuro de Catalunya dentro del ejercicio de nuestros derechos democráticos".

Otra moción presentada por el PSC, en la que abogaba por una consulta acordada y pactada con el Estado y no expresaba el apoyo a la prevista para el 9-N, ha sido rechazada por el pleno de la Diputación de Barcelona.

En la moción aprobada por la mayoría soberanista se expresa tanto el apoyo de la diputación a la consulta del 9-N como también "el compromiso de los ayuntamientos de las comarcas de Barcelona con la realización" de la misma, "facilitando todos los recursos y los instrumentos necesarios para hacerla posible".

En otro punto de la moción, se ofrece el pleno apoyo al president, al Govern de la Generalitat, al Parlament, y a los partidos políticos que apoyan la convocatoria y a la materialización de la consulta del 9-N".

Por lo que respecta a la moción del PSC, que sólo ha sido votada favorablemente por este grupo, el texto afirma que "sólo una estrategia unitaria de todo el catalanismo permitirá una salida positiva de la gestión actual", y subraya que "el diálogo, la negociación, y el pacto son condiciones indispensables y previas a una consulta de la ciudadanía".

En defensa de la moción aprobada, Joan Carles Garcia (CiU) ha indicado que Catalunya "vive un momento histórico, una revolución moderna que emana del pueblo ante la cual los responsables políticos tenemos que recoger los anhelos de la gente y ponernos a trabajar".

Después de apuntar que "lo importante es poner al alcance de los catalanes la posibilidad de decidir votando", ha considerado "una perversión que se confunda el Estado de derecho y se de por seguro que un tribunal anulará la consulta antes de ser convocada".

Jordi Portabella (ERC) ha recordado que "el pueblo catalán tiene una larga trayectoria de reivindicación de sus derechos nacionales", algo que se refleja, ha dicho, con los resultados electorales pero también "con las masivas movilizaciones de los últimos años".

Pilar Díaz, del PSC, ha admitido que "en Catalunya hay malestar e insatisfacción que no se resuelve sin una consulta a la ciudadanía, pero antes tiene que haber diálogo para votar como Escocia, de una forma acordada y legal". También ha rechazado "el inmovilismo de unos" y "que no se hayan hecho las cosas suficientemente bien desde aquí".

Desde ICV-EUiA, Àlex Mañas ha señalado que "hay una oleada de gente que quiere decidir votando el futuro de Catalunya y si desea un encaje o no con el Estado español", lo que "recoge lo mejor de la tradición unitaria del catalanismo y de la izquierda catalana".

Alberto Villagrasa, del PP, se ha mostrado contrario, tanto a la moción aprobada como a la del PSC, "que hace un flaco favor a la unidad del Estado español", ha dicho, además de acusar a los grupos proconsulta de "manipular la historia".